miércoles, diciembre 20, 2006

ETERNAS TRADICIONES NAVIDEÑAS

Villancicos:

Mil poetas le han cantado a la navidad. En primer término, la ha cantado el pueblo, con su fervor ingenuo, a través de todas las tierras, en millones de ternísimas coplas y villancicos. Los clásicos no desdeñaron cultivar este género poético, y existen hermosos villancicos de José de Valdivieso, Luís de Góngora, Bartolomé Aparicio, Lucas Fernández, Lope de Vega, Juan Caxes, Fray Pedro de Padilla, Francisco de Ávila, Ledesma, Ubeda, Gabriela Mistral, Jacinto Verdaguer, Bonilla San Martín, entre otros. Sin lugar a dudas el Pueblo es ha sido y será el gran poeta de los villancicos, para muestra un botón:

Ha nacido en un portal
Llenito de telarañas,
Entre la mula y el buey,
El redentor de las almas.
(Y dijo Melchor:
¡Toquen, toquen esos instrumentos,
Y alégrese el mundo, que ha nacido Dios!)

Esta noche nace el Niño,
Entre la paja y el hielo;
¡quién pudiera niño mío,
Vestirte de terciopelo!

En el portal de Belén
Hay estrellas, sol y luna;
La Virgen y San José
Y el niño que está en la cuna.

En Belén tocan a fuego,
Del portal sale la llama;
Es una estrella del cielo
Que ha caído entre la paja.

Los villancicos son una ¡Maravillosa manifestación de la poesía anónima del pueblo! ¡ hermosa expresión musical popular! con que, al son de tamborcillos, panderos, guitarras, violines, mandolinas, arpas, cuatros, maracas y cuantos instrumentos musicales se dispongan en las distintas regiones de España e Hispanoamérica, se realizan alabanzas al niño Dios los niños y los mayores.

Los Pesebres, Nacimientos o Belén:

En España e Hispanoamérica la navidad suele estar representada o simbolizada en los hogares mediante una tierna costumbre convertida en tradición, se trata de la reproducción o la representación física del nacimiento de Jesús de Nazáret, el Mesías de los cristianos católicos, pero también el profeta, el místico, el iniciado, el inspirador de muchísimas otras corrientes religiosas, entre ellos los Protestantes y evangélicos etc. En regiones españolas como Cataluña se le denomina pessebre; en otras zonas se le llama Belén, así como en diferentes sitios se denomina nacimiento. Esta ya inmortal costumbre atribuida en su origen al Santo Italiano San Francisco de Asís, por ser su precursor al ejecutar en el templo de Asís frente a testigos, un rito simbólico para adorar al niño Jesús, conmemorando su nacimiento. Fue lo que dio origen a esta significativa tradición, primero extendida por parte de Europa, y luego por toda Hispanoamérica; de tal manera, que en la mayoría de los hogares latinoamericanos suele conmemorarse la navidad, realizando esta bellísima reproducción del nacimiento de Jesús.

El nacimiento, que es como se le denomina en Venezuela, suele materializarse principalmente en cada hogar, colocando las Figurillas de yeso o cerámica, más popularmente de barro o arcilla, que personifican y representan a la Santísima Virgen María, a San José y al Niño Jesús, acompañadas por la mula y el Buey; junto a diversas figuras que encarnan pastores con sus ofrendas, gente humilde, aldeanos, campesinos labrando, mujeres samaritanas lavando, o amasando el pan, son los principales personajes del particular escenario, en el que sobresalen los coloridos cerritos o montañitas configurados con toda clase de elementos que le sirven de sustento, con gruesos papeles, pintados con distintos tipos de pinturas, surcados por riachuelos remedados con pedazos de escarcha o espejos y trozos de papel plateado; el paisaje interior adornado con musgo, arenas amarillas y piedras, frondosos helechos y diferentes plantas para brindar el apropiado ambiente natural, constituyendo todo un “territorio santo”, en el que se construyen poblados con casitas coloridas, algunas veces de menor tamaño que sus habitantes, despidiendo un toque de ingenuidad, que lo convierten en encantadora y auténtica obra de arte popular, que mientras más tosca, más hermosa. Toda una verdadera expresión artística nacida del imaginario del pueblo. Y en un rincón especial, los actores principales de la obra, casi siempre colocados dentro de un humilde portal que semeja el auténtico pesebre de Belén , con La Virgen María y San José adorando al Niño, que sonríe entre pajas secas, atemperado por el vaho que facilitan el buey y la mula. En el frontispicio del portal, brilla la fulgurante estrella de Belén, faro guía de los Reyes Magos, sabios y majestuosos, quienes también se encuentran en el desplegado ambiente a unos metros, dispuestos sobre algún camino color ocre que remedan las arenosas dunas desérticas del oriente, ya montados sobre sus jorobados camellos, y que parecen dispuestos a encontrar al niño para rendirle culto.

Los Reyes Magos y el Árbol de Navidad:

Es típico en España, después del 6 de Enero, conmemorar el denominado día de los Reyes Magos Melchor, Gaspar y Baltasar, evocados por el amor paterno filial. Es una bellísima tradición, en la que los padres a escondidas, dejan golosinas, caramelos, obsequios y regalos mientras duermen, a sus hijos pequeños, en sus zapatitos colocados avisadamente por los niños para que estos le sean depositados por los mágicos Reyes, esperados con ansiedad y traviesa disposición infantil.

En cambio, en Francia, el significado de estas dos particulares festividades –Navidad y día de Reyes- su profundo simbolismo religioso y de sutil ternura, se sintetizan en una sola: “¡ Noël !” Esto es, Navidad. A ejemplo de los países del Norte, el bosque navideño llega a las casas como un árbol de Noel, el abeto o pino de cuyas ramas cuelgan los obsequios que se distribuyen entre los familiares, fundamentalmente entre los pequeños, y que se abren a la media noche. ¡El árbol de Noel! ¿Quién fue él que lo colocó mágica y secretamente, trayéndolo a cuestas en su cargamento carísimo? Los infantes tiene la convicción, que el qué hizo la proeza fue personalmente “Pére Noël”, un gordito viejito de larga y poblada barba blanca, vestido con traje de aterciopelado rojo con ribetes de pieles blancos, y sosteniendo a la espalda un gran saco, que contiene sus mágicos regalos. Los pequeñitos de Francia, Bélgica y muchos otros países esperan ansiosamente la insospechada visita del “ Bonhomme Noel” con la misma actitud de ansiedad, con infantil ingenuidad, cargada de misteriosa magia, poseídos por la sana ilusión, el misterio y el entusiasmo más hermoso, que también viven y experimentan los niños en España e Hispanoamérica, con la espera de los Reyes magos o el Niño Jesús. Porque unos y otros igual vienen a traerles sus ansiados y apreciados regalos. Tanto el “Pére Noél”, los Reyes Magos y el Niño Jesús son portadores de dones de ternura infinita y mensajes del País de la ilusión.

El Árbol de Navidad es desde luego igualmente epicentro de los entusiasmos y felicidades hogareñas en las festividades navideñas, y en su adornado entorno se suelen disponer toda clase de obsequios familiares, igualmente, ante su aureola de espíritu festivo, se entonan canciones, como en España y en América los villancicos, esas extraordinarias manifestaciones musicales francesas que, inspirando su denominación de la oportunidad en que se ejecutan, se llaman sencillamente “Noëls”.

En la mayoría de los países del Norte, principalmente en Rusia y las naciones escandinavas, el mítico protagonista generoso que arriba con un aureola de magia y de un inusitado misterio, con toda clase de obsequios, es sin lugar a dudas Santa Claus o san Nicolás, según los niños, es un viejo con blanca barba que, suele penetrar a escondidas en los hogares durante la madrugada por el hueco de las chimeneas, y protegido por la sorpresa, les dejará los obsequios en los zapatos y medias, ubicados en sitios estratégicos en donde el personaje bonachón pueda verlos.

Tarjetas y Regalos:

Igualmente, hermosas costumbres de Navidad son las de las peculiares tarjetas expresando los buenos deseos a familiares, amigos y relacionados; el intercambio de tarjetas que, de acuerdo a costumbres inglesas, se hace por medio de cartulina artística, muy alusivas a la fiesta cristiana de la Natividad del Señor, bien reproduciendo obras de arte, costumbres del país, etc.

Así mismo, este auspicioso, civilizado y armonioso hábito de intercambio de tarjetas navideñas, como medio de la manifestación expresa de mutuos buenos deseos entre familiares y amigos, que fomentan los más nobles ideales de fraternidad humana, se amplían y evolucionan aún más con el intercambio ya no de delicadas tarjetas, sino de verdaderos regalos de toda índole, costumbre que, no obstante la crisis económica mundial, pareciera expandirse cada día con mayor vigor, Obsequios de toda clase, exquisiteces culinaria para los familiares con las que nos acercamos en intimidad; presentes sutiles de flores, chocolates y bombones, turrones, nueces y almendras, bienes de Dios, que se suelen obsequiar a las personas dilectas de nuestra amistad. Demostraciones de afecto para quienes más amamos; fervorosa costumbre cada vez más renovada, hábitos verdaderamente hogareños que se realizan en todas las naciones cristianas que las tradiciones instauran eternamente. Maravillosa armonía fomentada por los lazos afectivos, para poder sentarnos juntos en torno a la mesa navideña para compartir la vida felices y poder celebrar en paz con nuestros más íntimos afectos el hermosísimo aniversario de otra Navidad.

La Mesa de Navidad:

Habría que editar un exquisito libro para referirnos a esta tradición, para intentar sintetizar el amplísimo espectro de costumbres culinarias que se viven actualmente, y que forman parte de la bastísima cultura gastronómica española e hispano americana. Sin embargo, diremos que nada sintetiza más las tradiciones navideñas, que la costumbre de ataviar “la mesa navideña” familiar, con cualquiera clase de platos, preparados y exquisiteces variadísimas. Hay muchísimos manjares característicos de la celebración; en la Nochebuena, que es la que mayormente se conmemora en casi todas las regiones españolas y de Hispanoamérica. Es típicamente español, la sopa de almendras, besugo clásico, turrones, mazapanes, barquillos, almendras y piñones. El Pavo es el protagonista. En Venezuela el plato por excelencia es la ya emblemática hallaca navideña, acompañada con pernil de cerdo, ensalada estilo rusa con gallina, pan de jamón, acompañada de exquisitos postres como el dulce de lechosa (papaya), y la denominada torta negra con frutillas secas, pasitas negras y rubias maceradas en licor; no faltará el vino para la ocasión, o cualquier bebida alcohólica para brindar. Una mesa provista de mantel decorado con motivos alusivos a la navidad. Hermosamente dispuesta con las vajillas, copas y la cubertería atesorada con esmero por las familias; sin importar las clases sociales ni procedencias, sin distingos, en las mesas navideñas venezolanas no faltan las bendiciones. Familiares y amigos se esmeran para dotarlas de acuerdo a sus posibilidades, por muy modestas que estas sean, siempre se celebra la navidad sentados en torno a la mesa navideña, podrán faltar adornos, tal vez hasta el pesebre o un árbol con lucecitas intermitentes, pero la mesa se viste y sirve en navidad para cenar juntos en familia, tomándose una cerveza y escuchando la música que reza: “yo no olvido el año viejo, o faltan cinco pa` las doce”, que ya son un himno.

Tal vez podrían considerarse costumbres y hábitos muy materialistas, si pensamos que se trata de la conmemoración simbólica del Nacimiento de Jesús. Sin embargo, tiene su razón de ser en lo hermoso del alborozo de los pastores de Belén. Es preciso recordar que quienes comparten siempre la mesa navideña son los niños. Además que ese cumpleañero si que es muy apreciado por la mayoría, porque fíjense que “todos sin distingos” en España e Hispanoamérica, le quieren celebrar el cumpleaños cada año.

martes, diciembre 19, 2006

¿AFÁN Y ANSIEDAD EN NAVIDAD?

El poeta Maragall refiriéndose a la navidad expresó: “Pues EL niño ha vuelto, y es por ello esta fiesta la fiesta de la eternidad, del ser triunfante de todos los fantasmas de la muerte…Este niño sonriente que hay en el altar es el eterno Niño que vive en el fondo de nuestra alma”. Los niños, nuestros niños, sonríen a todo y las sonrisas son reflejo de la eterna sonrisa del niño, del niño que hay dentro de cada uno, del niño que vuelve siempre… Y esto es lo que la navidad festeja: “El poder de nacer eternamente, de renacer siempre de nosotros mismos, de ser siempre niños en algún modo, de ver cada cosa como si por primera vez la viéramos: con sorpresa, con inocencia, con sonrisa”.

Respetamos profundamente el pensamiento y las costumbres de todas las personas, sin embargo en esta época navideña creemos oportuno expresar que para nosotros definitivamente navidad no significa únicamente hallacas, pernil de cochino, jamón ahumado, pavo relleno, ensalada de gallina, salsa de ciruelas, bacalao portugués, pan de jamón, pizca andina, consomé madrugador, sopa de almendras, besugo clásico, mazapanes, barquillos y piñones, dulce de lechosa, torta negra, panetón italiano, turrón de almendras o de maní español y toda clase de suculentas y copiosas comidas; de exquisiteces gastronómicas que suelen prepararse como platos típicos navideños por estas fechas, en distintas regiones.

Tampoco significa únicamente la navidad frívola celebración social adornada con coloridas luces intermitentes, pinos y arbolitos, pesebres, San Nicolás y amenizadas con villancicos, gaitas y música de todo tipo; para brindar con finos licores, vinos, champaña, whisky, Brandy, ron, cerveza, ponche crema y toda clase de bebidas espirituosas; ni oportunidad de reuniones festivas para estrenar y lucir vanidosamente las nuevos vestidos , prendas y joyas para la ocasión; no es sencillamente momento para congratularse entre amigos y familiares haciendo relaciones públicas, explotando voladores, y fuegos artificiales, ni de andar de compras en tiendas, en cócteles, almuerzos corporativos, cenas de hermandad navideñas, bailes, gaitazos, parrandas, amanecidas, aguinaldos, serenatas, patinatas etc. Navidad naturalmente significa y es, mucho más que eso; su significado es muchísimo más trascendental y profundo, que la superficialidad del disfrute gastronómico o social eventual y circunstancial.

Para nosotros todas estas cosas maravillosas, que normalmente la gente comúnmente hace para intentar alegrarse y divertirse en navidad, en realidad nos distraen del verdadero espíritu, propósito y razón de la celebración simbólica del nacimiento de Cristo. Pero, como dice la célebre canción: ¿A quien no le va a gustar…?. Decía mi abuela materna: “mijo, a nadie le amarga un dulce”, ¿Quién lo niega? Todos nuestro hábitos, costumbres y ritos sociales, gastronómicos, culinarios, musicales, de toda índole, forman naturalmente parte de nuestra rica cultura hispanoamericana, y es lógico que deban manifestarse, es muy placentero, provechoso, necesario y útil que se practiquen. Pero lo que queremos señalar respetuosamente, es que no deben ignorarse y desdeñarse otras “cosas” que también son igualmente importantes, y que poseen gran trascendencia y significado, que son en realidad tanto o más indispensables para logar ser auténticamente felices, y que pueden incluso ser más gratificantes que cualquier banalidad humana, por extraordinaria que sea o lo parezca ser.

Me refiero a la alegría de vivir, de experimentar la profunda sensación de paz que puede sentirse al comprender el verdadero sentido de la fecha que conmemoramos, de lo que significa realmente la navidad; esa sensación interior que borra toda huella de vaciedad espiritual, que suprime la tristeza, la pena, que vuelve polvo la ansiedad, la angustia, la incertidumbre, que diluye la arrogancia y el egoísmo humano a su mínima expresión. No cometeremos la ligereza de repetir clichés rebuscados por “genios” de la comunicación, de la publicidad y del marketing comercial, quienes han convertido la navidad en la oportunidad para multiplicar las ganancias de los comerciantes no. Por ejemplo, repetir como loros aquello de que es época de reencontrarse en familia (no ahorre), es época de paz (no trabaje), de “regalar” y compartir (consuma y gaste) etc. Todas esas cosas en el fondo nos producen es afán y ansiedad.

El conmemorado de este 25 de diciembre, el cumpleañero nos expresó claramente este mensaje sobre el afán y la ansiedad:

“Por tanto os digo: No os afanéis por vuestra vida, qué habéis de comer o que habéis de beber; ni por vuestro cuerpo, que habéis de vestir. No es la vida más que el alimento, y el cuerpo más que el vestido? Mirad las aves del cielo, que no siembran, ni siegan, ni recogen en graneros; y vuestro Padre celestial las alimenta. ¿No valéis vosotros mucho más que ellas? ¿Y quien de vosotros podrá, por mucho que se afane, añadir a su estatura un codo? Y por el vestido ¿por qué os afanáis? Considerad los lirios del campo, cómo crecen: no trabajan ni hilan; pero os digo, que ni aun Salomón con toda su gloria se vistió así como uno de ellos. Y si la hierba del campo que hoy es, y mañana se echa en el horno, Dios la viste así, ¿no hará mucho más a vosotros, hombres de poca fe? No os afanéis, pues, diciendo: ¿Qué comeremos, o que beberemos, o que vestiremos? Porque los gentiles buscan todas estas cosas; pero vuestro Padre celestial sabe que tenéis necesidad de todas estas cosas. Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas. Así que, no os afanéis por el día de mañana, porque el día de mañana traerá su afán. Basta a cada día su propio mal” ( El Nuevo Testamento. S. Mateo 6,7. Lc. 12.22-31).

En realidad el profundo significado de la navidad sorprende por su simplicidad, se trata no únicamente de celebrar y conmemorar el nacimiento de Jesús de Nazaret quien nació en Belén. Precisamente el verdadero punto central de este asunto esencial, es que se trata del “nacimiento del Hijo de Dios”. Porque nos podrán decir cualquier cosa de él -lo que quieran- cada quien con su respetable pensamiento, su religión, e ideología; pero para nosotros los cristianos “Jesús es el salvador de nuestras almas”, quien nos da verdadero reposo y consuelo, es nuestro salvador, sólo eso; y él si es verdad que no necesita quien lo defienda. Jesús nos dijo: “Conoced la verdad y ella os hará libres”. Para nosotros la verdad es que Dios existe y es nuestro creador y padre celestial, y eso nos hace libres de la esclavitud del temor; jamás sentiremos temor porque nos sabemos hijos del Todopoderoso, así de sencillo. Además, ¿cómo olvidar estas palabras de Jesús de Nazaret frente al Concilio ante el Sumo Sacerdote que lo interrogaba? : “…Eres tú el Cristo, el hijo del Bendito? Y Jesús le dijo: Yo soy; y verás al hijo del hombre sentado a la diestra del poder de Dios, y viniendo en las nubes del cielo…” (S.Marcos 14-62).

Es imposible vivir afanados y ansiosos si se tiene la profunda convicción de la existencia de Dios, y el infinito consuelo de ser sus amados hijos; la confianza más absoluta, de contar siempre con su protección paternal eterna. Cuando se logra sentirlo en tu interior, en tu alma, no hay ninguna vana ilusión humana, que pueda hacernos sentir tristes, ni padecer penas, dolores, ni angustias o ansiedades; siempre estaremos plenos de gozo interior, esa sensación es definitivamente la que sentimos y nos invade todo nuestro ser en navidad. Por eso es que hay que buscar primero el reino de Dios, y lo demás se nos dará por añadidura. Es decir, que la confianza superior de sentirnos hijos de Dios, es la que en definitiva nos hace inmunes, invulnerables al afán y la ansiedad que nos pudiera eventualmente provocar lo superficial, lo frívolo y mundano. Sin ninguna duda les aseguro, que la felicidad eterna nos la da únicamente Dios, más nada, ni nadie.

lunes, diciembre 18, 2006

JESÚS EN NAVIDAD

En esta época navideña, es propicia la ocasión para reflexionar, y hacernos autocrítica; igualmente debemos procurar la reconciliación, necesitamos perdonarnos mutuamente nuestras fallas, ofensas y errores. Sea la ocasión propicia para recordarles la palabra de Jesús a todos nuestros hermanos. Nos aproximamos a la conmemoración de su nacimiento, celebraremos la navidad en escasos días; en tal virtud, hemos querido recordar este hermoso mensaje, que puede servirnos para despertar en nuestro interior nuestros más nobles sentimientos.

“No juzguéis, para que no seáis juzgados. Porque con el juicio con que juzgáis, seréis juzgados, y con la medida con que medís, os será medido. ¿Y por qué miras la paja que está en el ojo de tu hermano, y no echas de ver la viga que está en tu propio ojo? ¿O cómo dirás a tu hermano: Déjame sacar la paja de tu ojo, y he aquí la viga en el ojo tuyo? ¡Hipócrita! Saca primero la viga de tu propio ojo, y entonces verás bien para sacar la paja de tu hermano.”( S. Mateo 6,7. Lc. 6.37-38,41-42).

jueves, diciembre 14, 2006

ENTRAMPADOS POR EL ODIO ¡COMUNISTA!

Este es un artículo, basado en la obra del reverendo sacerdote católico José Francisco Corta (1.962) titulada “Frente al Comunismo Ateo”, realizo en parte una reseña contextual con nuestro particular aporte personal. Si encuentran alguna similitud con la actual circunstancia vivida en Venezuela, confieso sinceramente que no es una mera casualidad.

Sostenía el reverendo Corta: “Si el Comunismo es “peste”, “falsa redención”, “veneno” y “duro yugo”, como dicen los Sumos Pontífices, ¿Por qué avanza tanto?, ¿cuál es el secreto de su éxito? ”. He aquí varias razones, que consideramos esenciales para respondernos:

En virtud de que el Comunismo es una escuela prodigiosa de arribismo, y hay muchos degenerados que quieren subir muy alto, sin importar los medios. Para un grupo de seres ambiciosos y resentidos, frustrados en sus ideales de poder por otros medios, el Comunismo les resulta una carrera muy provechosa. De ahí “el frenesí” de no pocos inescrupulosos “revolucionarios” por transitar esa vía. Igualmente, en su gran mayoría, ellos no poseen caracteres comunes, sino que son seres normalmente muy curtidos en las dificultades de la vida, usan sus mejores talentos para trabajar en el avance de la revolución. Tan expandido mecanismo de propaganda y agitación no podría desplegarse, si no estuvieran conduciéndolos “líderes” muy bien dotados y espectacularmente ambiciosos.

El éxito, por medio de la venganza y aplastamiento de algunos explotadores del pueblo, le brindan grandes posibilidades a la revolución comunista. El odio fomentado con gran despliegue de audacia es cómo un fuego encendido junto a gasolina, que puede auspiciar enormes explosiones sociales. Varias de las ejecuciones a inocentes indefensos, llevadas a cabo por fanáticos adoctrinados y enfurecidos, practicadas en distintas partes del mundo en revueltas sociales, dirigidas por comunistas, han provenido de provocar artificialmente las iras populares. La humanidad ha sido testigo de esas absurdas venganzas populares encausadas por sus líderes, que tienen un poderoso impacto en las muchedumbres, que son usadas como instrumento de lucha. Es mil veces más sencillo empujar a las masas enardecidas al bandidaje, el saqueo, al despojo de los acaudalados, es simple alentar el odio hacia la denominada oligarquía, provocar reacciones de venganza hacia los etiquetados como explotadores, el odio hacia los capitalistas. La tesis del paredón petrifica de temor a los inocentes y exalta las bajas pasiones de los manipulados desposeídos, las masas que son presa de los mensajes de sus líderes benefactores, quienes han venido a salvarlos de tantas injusticias. Definitivamente el empleo del terror es sin duda la principal arma de lucha que emplean los comunistas para conquistar adeptos y fanáticos seguidores.

El espejismo de algunos éxitos rojos en la ciencia, economía y tecnología bélica ha conmovido la fe de no pocos intelectuales. El poderío militar, los proyectiles continentales, las bombas atómicas, el haber llegado a ser superpotencias, son éxitos que tienen perfecta explicación en la grandeza material de imperios como el Soviético (ya caído), como China, y Corea del Norte. Rusia hoy día continúa agazapada, y discretamente sigue ejerciendo su maléfica influencia entre los pueblos democráticos, sin disimularlo, negociando toda clase de armamento bélico que fomentan las guerras fraticidas entre los pueblos.

Las luminosas ofertas que encandilan, y que realizan los comunistas para conquistar y reclutar ingenuos adeptos. Su Santidad el Papa Pío XI, exclama como causa del despliegue comunista: “Es a base de engaño como triunfan”. Para captar la atención popular, se infiltran en todas partes, en los gremios, en los sindicatos, se relacionan con los obreros (el proletariado), los campesinos, los estudiantes, los profesores universitarios, los maestros, los militares, los profesionales, los artistas, los comerciantes; llegando a adquirir un perfecto conocimiento de lo que el pueblo percibe, desea, y a lo que aspira. En un primer momento, durante la etapa de captación, fingen preocuparse por sus intereses, por eliminar los atropellos ciertos, producidos por los explotadores, ofrecen erradicarlos y obtener una justa repartición de las riquezas. Se apersonan como los salvadores, los Mesías del pueblo. Auspician y fomentan deliberadamente los conflictos laborales, aupando el anti norteamericanismo, atizando el anticapitalismo y el antiimperialismo, verdadera razón –de acuerdo a ellos- de todas la calamidades; propician hasta el paroxismo el odio contra los ricos. Consiguen varios éxitos y reivindicaciones para el pueblo. En consecuencia, obtienen prestigio, fama de que trabajan sinceramente por el beneficio colectivo.

“Una vez que ellos han llegado a conquistar el sentimiento popular, pueden enderezar al pueblo hacia metas las más espantables. En momentos de desesperación, hábilmente provocados por los mismos comunistas, los pueblos exasperados se hacen aliados aun del mismo diablo. El Comunismo no trata de resolver los problemas obreros, pero sí de aprovecharse del malestar social para enrumbar al pueblo a la revolución” (José Francisco Corta). Y según atinada reflexión de Maquiavelo, “los hombres son tan simples y tan débiles, que el que quiera, encuentra fácilmente cándidos”. Decía muy bien Monseñor Ancel: “No nos hagamos ilusiones. La mayor parte de las personas, no admiten una teoría porque sea verdadera, sino porque les agrada. Es una miseria humana, pero es casi universal”. Las masas, sacudidas por expertos agitadores, no temen en arrojarse a los abismos de degradación en períodos de crisis, hambre, huelgas y miseria. Los comunistas conocen muy bien la técnica de las promesas deslumbradoras, que no van a cumplir.

Las multitudes se encuentran muy propensas a caer en la trampa de la ideología comunista por la proliferación de la pobreza, de su miserable estado de abandono, en la que han caído, como consecuencia del fracaso de muchos regímenes de inspiración aparentemente liberal, por la aplicación de políticas económicas inhumanas, que han fracasado al no llenar las inmensas expectativas que generaron entre densos sectores de la población paupérrimos, desencantados, y olvidados a su suerte, por políticos y líderes demagogos, inmorales, corruptos seudo democráticos, que prefirieron aplicar políticas macroeconómicas neoliberales, explosivas y hambreadoras, siguiendo al pie de la letra las reglas capitalistas del mercado, sacrificando a sus pueblos a las más espantosas privaciones, y convirtiéndolos en caldo de cultivo para que dirigentes comunistas disfrazados de demócratas, muy populistas, aún peores que aquellos, los conviertan en objetos de sus ambiciones, entrampándolos con el odio comunista, para usarlos a favor de la expansión y despliegue de sus proyectos políticos. Decía Pío XI al respecto: “No hay que maravillarse de que en un mundo tan hondamente descristianizado se desborde el error comunista”. En un medio tan descristianizado, los comunistas obtienen con mayor facilidad cualquier clase de connivencia cómplice de individuos proclives al delito; sus importantes logros son causa fundamentalmente de serias traiciones, fraguadas por sujetos deshumanizados, que no se sonrojan cuando les toca venderse al mejor postor, quienes son presas fáciles en razón de su codicia o por su cobardía.

La publicidad sagaz y habilidosa es otro de los eficaces mecanismos de adoctrinamiento, ideologización y reclutamiento comunista. Esta propaganda es inescrupulosamente mal intencionada; obstinadamente pertinaz, despiadadamente permanente, interminable, y arteramente optimista. El Papa Pío XI la calificó así: “Propaganda verdaderamente diabólica, cual el mundo tal vez jamás ha conocido”, “propaganda dirigida desde un solo centro”; “adaptada habilísimamente a las condiciones de los diversos pueblos”; “que dispone de grandes medios económicos, de gigantescas organizaciones, de congresos internacionales, de innumerables fuerzas bien adiestradas”; “que penetra poco a poco en todos los medios aun en las poblaciones más sanas”.

La silenciosa pero artera conspiración internacional, realizada por buena parte de la prensa mundial no católica, otorga, facilita y permite una importante contribución al Comunismo internacional; porque hace silencio cómplice de sus planes y atrocidades. Su santidad El Papa Pío XI sostenía que esa conspiración del silencio “está apoyada por varias fuerzas ocultas, que desde hace tiempo tratan de destruir el orden social cristiano".

En Venezuela pareciera estarce desarrollando progresivamente un plan milimétricamente fraguado, nos lo presentan edulcorado como socialismo del siglo 21, pero que sistemáticamente siembra el odio entre las clases sociales y fomenta la división entre los venezolanos para implementarnos un sistema de corte realmente comunista por etapas, por fases, previa inoculación peligrosísima del mortal y diabólico virus del odio entre hermanos de un mismo pueblo; pareciera que estuviéramos entrampados por el odio comunista, y siendo víctimas de un gran engaño. Estamos entrampados por el odio táctico comunista, que sólo le beneficia al "instigador".

martes, diciembre 12, 2006

HUGO CHÁVEZ: ¿EL SAPO Y LA ESTACA?

En Venezuela existen actualmente dos preocupantes visiones divergentes en el seno de la oposición para explicarse lo ocurrido con el resultado electoral. Un grupo minoritario sin “liderazgo visible”, que a todo evento pretende justificar la derrota alegando que existió un fraude electoral avalado y cohonestado por Manuel Rosales, Teodoro Petkoff, Julio Borges, Leopoldo López y la mayoría de su comando de campaña, para permitirle a Chávez reelegirse, legitimarse y facilitarles a sus adversarios cómplices, la coexistencia pacífica a riesgo de perderlo todo, si no accedían voluntariamente a reconocer la derrota opositora, lo cual insinúa la deshonestidad de ese trío “presunto negociador” a espaldas del país, que los convertiría no sólo en unos “traidores”, sino que también en unos “cobardes interesados” únicamente en sobrevivir políticamente, a costa de lo que sea. Otro grupo, liderado por Rosales y Petkoff, aparentemente “mayoritario”, que aunque reconocen el abierto y descarado ventajismo del régimen, y las condiciones adversas en las cuales se vieron obligados a participar en un proceso electoral que sabían difícil de ganar, que admiten haber sido vencidos por el presidente, y alegan una victoria política, esperanzados en lograr articular a futuro a la oposición unida con posibilidades de éxito a largo plazo, retomando los espacios perdidos, cedidos al chavismo, con el objetivo de continuar en la lucha democrática, y que supondría construir una nueva mayoría, que impediría las pretensiones chavistas, que sirvan de muro de contención al proyecto expansionista y hegemónico revolucionario. No nos pronunciaremos por el momento, ni a favor ni en contra de estas posturas; seguramente en el futuro la verdad saldrá a flote, estaremos dispuestos a opinar al respecto. “No hay verdades absolutas”.

Cualquiera sea el desenlace de este gravísimo dilema que enfrenta la oposición, es evidente que el éxito en política se mide por los resultados, tal y como me aseveraba un veteranísimo dirigente político. A la luz de los resultados obtenidos, debemos comenzar por admitir que el presidente reelecto Hugo Chávez ha logrado un relativo éxito en su ya dilatada actividad política, desplegada desde que irrumpió en la escena política venezolana. No haremos aquí un ejercicio de narración de su historia como dirigente, no es nuestra intención; sin embargo, desde nuestra óptica -tal vez parcializada- haremos un esfuerzo por explicar sin condicionamientos ideológicos, lo que consideramos ha sido la estrategia exitosa de Chávez.

La estrategia principal de Hugo Chávez se sustenta en varios ejes, uno sin duda es un eje estratégico esencialmente político, que descansa en la ideologización y control político de toda la sociedad, previa toma absoluta del foro legislativo nacional por excelencia, como lo es La Asamblea Nacional (que controla absolutamente), para al mismo tiempo ejercer su influencia política y control del resto de los poderes públicos del estado, como el Poder Judicial, el Poder Moral y el Poder Electoral ; igualmente aplica un constante reclutamiento y adoctrinamiento militante, de partidarios políticos, persiguiendo el fortalecimiento disciplinado de su partido (MVR, obtuvo 4.700.000 votos) y el resto de organizaciones que lo respaldan,(Podemos, Patria Para Todos, Partido Comunista de Venezuela, MEP, UPV, y muchos otros) financiándolos sin ningún pudor y sin medida, suministrándoles toda clase de recursos económicos, la indispensable y adecuada logística, previa eliminación del financiamiento legal a los partidos políticos tradicionales de la oposición, facilitando su declive y condenándolos a su disolución por asfixia económica, provocando deliberadamente su disolución, liquidación o neutralización, y de la vieja desacreditada dirigencia política opositora, para pulverizarla, o reducirla,(los ha estigmatizado como los culpables de todos los males del pasado), basándose paralelamente en una efectiva y agresiva táctica de comunicación sistemáticamente repetida, para lincharlos moral y éticamente ante el país, exponiéndolos al escarnio y al desprecio público, mediante mensajes de difusión masiva muy bien estudiados y articulados, campaña publicitaria realizada con los recursos del estado, que ha sido permanentemente ejecutada sin vacilación, es de realización sucesiva.

Un eje estratégico, cívico militar. Desarrollado milimétricamente para desmantelar los antiguos comandos naturales e institucionales de La Fuerza Armada Nacional, y sustituirlos por individualidades incondicionales, adoctrinados en su proyecto revolucionario; garantizándose así el poder de fuego, la fuerza represiva o disuasiva indispensable disponible a su mando incuestionable (es comandante en Jefe de la Fuerza Armada Nacional, era ambiguamente también presidente y candidato presidencial), en caso de serle necesario aplicar la represión, ante cualquier intento de insurrección popular, desestabilización, o eventual protesta de la oposición civil; acompañado de la sistemática conformación de milicias mercenarias armadas de sus partidarios incondicionales, integradas por reservistas; guerrillas pro bolivarianas; para militares urbanos, y de grupos de choque al estilo miliciano mercenarios; encarnados en míticas facciones ; algunos civiles empleados de entes públicos, muy violentos agavillados seguidores de convictos y confesos activistas políticos, personajes convertidos en oráculos, que deciden quien es revolucionario y quien contrarrevolucionario, o traidor a la patria (andan armados amenazantes desplazándose en poderosas motos de alta cilindrada, por la vía publica, disponibles para intimidar o agredir a quien decida su líder); y otros de menor renombre, que parecieran operar auspiciados, promovidos y financiados sin ninguna vergüenza por el gobierno, a plena luz y con la presunta complacencia de los órganos del poder público, que inexplicablemente mantienen un silencio cómplice; como el Fiscal General de la República; el defensor del Pueblo y el Contralor General de la República; y presuntamente con la notoria omisión del Tribunal Supremo de Justicia, quienes lucen impotentes, inertes, y parecieran ciegos, sordos y mudos al ignorar esos temas tan delicados, que afectan la paz de la población y amenazan la normalidad democrática, abusos estos, que están a la vista de toda la opinión pública, y ocurren con el asombro de la ciudadanía indefensa e impotente, que ve como estos grupos operan sin ninguna restricción policial o militar de los cuerpos de seguridad del estado. Esto como es obvio, acompañado también de una política de armamentismo muy agresiva, compra y dotación de armas descaradamente para dotar a grupos que no son militares profesionales; importación de fusiles, helicópteros y aviones a Rusia, realizada sin ningún escrúpulo, ni justificación o necesidad; por el contrario, empleada para la guerra psicológica y la difusión del temor, dirigida a la población civil y contra sus adversarios en particular.

Así como un eje estratégico, que denominaremos de sustentación y financiamiento económico, combinado con una táctica legislativa evidente, que le ha permitido controlar todas las divisas extranjeras mediante una ley que restringe la libre compra y circulación de dólares, usándolo como arma política, (como premio y castigo). Dicen que en la política quien controla el poder del dinero tiene la primera opción. Igualmente, Chávez ha logrado reformar la Ley del Banco Central de Venezuela, para permitir que el ente emisor antiguamente impedido por la ley, le otorgué los caudalosos recursos de la renta petrolera directamente, esto supone que el gobierno ha tenido también a su disposición las anteriormente restringidas reservas en dólares del banco Central de Venezuela, mediante una indebida presión que ejerció convenientemente con la aparente displicencia de todos los diputados de La Asamblea Nacional, quienes le han dado sostenimiento, y respaldo legislativo para controlar a su antojo, y sin ningún control o restricción, los multimillonarios recursos económicos que le han posibilitado desplegar todas sus acciones, dirigidas en primer lugar a sostenerse en el poder -ya consumado- y en segundo término, en sus planes confesos de expansión revolucionaria en todo el continente americano, y en los distintos escenarios mundiales en los que interviene abiertamente sin ningún miramiento.

El más delirante de los ejes estratégicos, sería el denominado geopolítico internacional, desarrollado con la tutoría de la internacional comunista, la vieja izquierda internacional y su liderazgo histórico, sus tutores de mayor rango y experiencia , que según confesó él mismo “no estaba muerta sino de parranda” y que vuelve por sus fueros persiguiendo su recuperación, en América Latina. Consiste en primer lugar, en el empleo de las riquezas petroleras venezolanas para contribuir con sus causas e ideales políticos e ideológicos, y combatir contra el “Imperio Norteamericano Capitalista salvaje”; así como en lograr la efectiva expansión de su proyecto revolucionario socialista ya develado (en Bolivia, Ecuador, Uruguay, Argentina, Brasil, Nicaragua ya están posicionados). Es el más ambicioso de los ejes estratégicos, y el cual desarrolla con mayor “frenesí”, ya que el presidente pareciera estar persuadido por la ambición política de expandir su revolución al exterior; inexplicable e injustificable, si consideramos que los problemas internos que agobian a la mayoría de la población venezolana, parecen agravarse. A veces, Chávez luce incapaz en sus posibilidades de resolverlos, quedó en evidencia en la campaña electoral. Existen demasiados problemas internos pendientes por resolver, luego de 8 largos años de gobierno, y con tantos recursos económicos invertidos en el exterior y en propaganda; pareciera excesivo e injustificable su obseción de expansión revolucionaria continental.

Chávez ha sabido fríamente calcular y medir adecuadamente los tiempos, sopesar los riesgos, evaluar los escenarios posibles, ha sido audaz, para determinar apropiadamente las fases en las que ha debido implementar la estrategia, y ejecutar sus tácticas de corte estalinistas leninistas castristas y militaristas. Su estrategia consiste esencialmente en dividir a la sociedad venezolana aplicando tácticas políticas camufladas basadas en el estilo castro comunista, a la vieja usanza de las tácticas estalinistas leninistas aplicadas en la vieja Rusia (fomenta el odio entre los pobres y los ricos valiéndose de las desigualdades), para intentar imponer su proyecto político socialista muy personalista y autocrático, de ser posible por la vía democrática, dándole apariencia legal, pero de ser necesario e indispensable por cualquier otra vía,incluso la del enfrentamiento armado con quienes considera la rancia oligarquía conservadora; cualquiera sea el precio que hubiera que pagar, su lema es prestado, poco original (patria o muerte venceremos). Ha confesado abiertamente sus deseos, nos ha dicho lo que aspira y quiere ejecutar, también nos ha expresado con toda claridad cómo lo hará, o mejor dicho, como pretende hacerlo, qué es lo que aspira hacer a futuro para eternizarse en el poder. Sería por la vía de una reforma constitucional impuesta por su irrita e incondicional Asamblea Nacional monocolor, que consagraría la reelección indefinida (amenaza de la campaña contra la oposición si se retiraba de la contienda) como principio constitucional. “Amanecerá y veremos”, porque “una cosa piensa el burro y otra quien lo arrea”, decían los viejos de la comarca.

Mientras Chávez ha ido ejecutando con pasmosa frialdad su ya develada estrategia mediante sus tácticas taimadas, apoderándose de todo el control del poder del estado para usarlo sin escrúpulos contra la sociedad democrática indefensa; pacientemente ganando terreno conquistando sagazmente a los desposeídos, a los pobres, quienes son mayoría -queramos o no reconocerlo- y también a los ricos oportunistas; asfixiando sistemáticamente a la sociedad democrática, quitándole espacios a la oposición política que ha sido combatida inescrupulosamente mediante todo el poder desmedido del aparato gubernamental ventajista del estado, puesto al servicio de un caudillo y de su proyecto político hegemónico; conculcándonos progresivamente legítimos derechos constitucionales a los ciudadanos; alguna dirigencia “terca y torpe” de la oposición venezolana de nuevo en trámites de divorcio y echándose mutuamente la culpa de la derrota; en vez de tener una actitud adecuada para enfrentarlo, incurre sin proponérselo en el error estratégico de volver a dividirse, cae en la táctica del maniobrero exitoso.

Chávez es un maestro en el juego de la guerra psicológica, la emplea y la seguirá desplegando sin ningún rubor, aplica el axioma maquiavélico de “dividir para reinar”; él sabe que cuenta con el 46% del respaldo en el país, también que buena parte del resto lo adversa, la oposición unida obtuvo el 29%, por eso no descansa ni descansará para seguir dividiendo a la sociedad y por ende a sus oponentes; ya logró que un porcentaje importante de votantes se abstuviera de votar en su contra (25%), sumado a la oposición representan el 54%. Chávez consigue así siempre prevalecer sobre sus adversarios, lo hace intimidando, discriminando, aplica las tácticas del terror político sin ningún escrúpulo, lo hizo en PDVSA con la campaña de discriminación brutal de su servil Ministro contra sus trabajadores, y lo hizo sin inmutarse en los Ministerios y en todos los organismos públicos, aplicó y aplicará la intimidación a través de las infamantes listas Tascón, Maisanta, y también fomentó el miedo entre los votantes que prefirieron abstenerse por reservas con las emblemáticas capta huellas.

Su estrategia ha sido exitosa, en virtud del resultado electoral reciente, ganó en todos los estados del país, ha logrado consolidar su proyecto político denominado como revolucionario, posee una red de militantes políticos envidiable, que moviliza a su antojo, los recursos económicos y logísticos para desplegarla a sus anchas, organización suficiente, apoyo militar, carisma innegable, un verbo encendido con tintes nacionalistas y patrioteros, con un estilo de oratoria hipnotizante, Chávez es dicharachero, arrogante, casi grotesco, emplea un lenguaje coloquial y directo, mantiene ese vínculo afectivo irrompible con sus partidarios y la gente sencilla del pueblo, a través de los medios de comunicación, es percibido casi como una estrella de rock, un artista más popular que cualquier astro del celuloide, es el centro de atención para todos, se emplea eficazmente con una política de comunicación agresiva y ambiciosa que ideo logiza, y difunde toda clase de mensajes subliminales a las masas; creó la televisora Tele sur de señal abierta, modernizó a venezolana de televisión, la dotó de equipos y tecnología de punta, expandió su señal; ha auspiciado nuevas televisoras del estado y múltiples redes de radio emisoras comunitarias, que difunden sus mensajes y le son afectas y agradecidas; creó Petro-América; ha fortalecido y consolidado el sistema de las emblemáticas misiones sociales, que ni la oposición se atreve a cuestionar; en fin, ha desplegado y blindado su proyecto político derrotando en “todos los terrenos” a sus ya extenuados opositores. En verdad Chávez es un “adversario formidable”. Ante un individuo así, capaz de hacer lo que él, pienso honesta y sinceramente, que la oposición en vez de estar cayendo en ese terreno de las inconvenientes mutuas acusaciones, debería estarce es preguntando: ¿Será que la mayoría de la gente como que prefiere a Chávez? ¿A la gente como que le gusta Chávez? ¿Que hacer para vencerlo democráticamente? (Este será el tema del próximo análisis)

¿En la unidad opositora no se han puesto a pensar, que Chávez como que ha ganado desde hace tiempo, que viene ganando y quitándoles terreno poco a poco; y que las razones de su “relativo éxito” no son tan simples; que las causas de su poder político alcanzado y hoy consolidado son diversas y combinadas; han caído en cuenta que lo logrado por él, no se trata únicamente de un “fraude” continuado, sistemáticamente planeado y ejecutado con pasmosa frialdad, que su influencia marcada y decisiva en la sociedad es real, efectiva y directa; que su acción política ha sido desplegada constante y exitosamente, que Chávez es un individuo “trabajador incansable”, un “animal político habilidoso”, dotado de especiales condiciones para la dificilísima actividad política, que los supera en muchas habilidades que ustedes no tienen (los intimida, le temen), o no ejercitan hace rato por omisión, inacción y ostracismo; y que los ha vencido por los sucesivos y recurrentes errores, por su incapacidad manifiesta de articular una contra estrategia, adecuada que implemente también tácticas exitosas que logren vencerlo? Les diré algo más: nadie por extraordinario que sea o pretenda ser es invencible, sólo Dios lo es; pero, “que culpa tiene la estaca si el sapo salta y se ensarta”.

lunes, diciembre 11, 2006

PENSAR EN GRANDE, VIVIR EN GRANDE

Desenterrando recuerdos de juventud me tropecé con un antiguo libro editado en el año 1.960, el cual se titula “La Magia de Pensar en Grande”, escrito Por el Doctor en Filosofía David Joseph Schawartz; el cual leí en mi adolescencia; lo atesoro con especial aprensión, tal vez porque en aquellos controversiales y difíciles años de confusión juvenil, solía abrirlo al azar en cualquier página, para leer alguna frase que pudiera inspirarme en medio de algún momento turbulento que estuviera padeciendo, como si con aquel habito supersticioso y fantasioso se me abrieran salidas a cualquier padecimiento momentáneo que experimentara en el instante; nada más lejos de la verdad, que aquella extraña actitud, que asumía frente al desconocido e insondable futuro. En todo caso, rememorando aquel recurrente episodio, tomé la obra, leí de nuevo el título, aprecié sus detalles en la portada, sus gastadas páginas, la amarillenta apariencia de sus hojas, testigos inmutables en el tiempo de los sueños juveniles de aquella época fabulosa, cargada de extraordinarias aficiones y de alucinantes aventuras.

Repetí mi rito, expectante como si fuera la primera ocasión, con el “encantado” libro entre las manos cerré los ojos, potencié de nuevo sus pretendidos poderes mágicos apretándolo, reabrí sus misterios, y descubrí entre líneas subrayadas estas líneas: “Los principios básicos y conceptos que soportan “La magia de pensar en grande” vienen de las fuentes más altas del linaje, de las finas y grandes mentes pensantes que aún viven sobre el planeta tierra. Mentes como la del profeta David, quien escribió: “Como un pensamiento está en el corazón, así es él”; mentes como las de Emerson quien dijo: “Los grandes hombres son los que ven que el pensamiento rige el mundo”; como Milton, que en su “Paraíso perdido” afirmó: La mente es su propio lugar, y por si misma puede hacer un cielo de un infierno y un infierno de un cielo”; mentes maravillosamente perceptivas cual la de Shakespeare, quien observó: “No hay nada bueno ni malo, excepto si los pensamientos lo hacen así.”

“Pero, ¿de dónde parte la prueba de ello? ¿Cómo sabemos si el pensamiento dominante es el justo? Honestas preguntas. La prueba viene de las vidas selectas de las personas que le rodean, las cuales, a través de tajantes éxitos, realizaciones y felicidad, demuestran que el pensamiento en grande hacen un trabajo mágico.”

“Piense en grande y vivirá en grande. Vivirá en grande y será feliz”. Cualquiera me diría que no bastaría esta forma de pensar para lograr tener éxito, si ya lo se, se requiere de muchísimo más, pero hay que pensar antes.