viernes, enero 26, 2007

ORÁCULOS INMACULADOS

El acontecer cotidiano transcurre a veces de forma incomprensiblemente confusa; observamos en el diario trajinar a seres diversos desplazándose inertes por los distintos escenarios como máquinas suicidas y ambulantes, parecidos a zombis autómatas desprovistos de sensaciones, emociones, sueños, anhelos; tropezando con las paredes de sus ocultos temores, frustraciones, egoísmos y dudas; entre ellos se infringen hondas heridas cada vez que se tropiezan, empujados por sus narcisos egos; se llenan de ira, vomitan insultos, se restriegan en la cara renovadas facturas enmohecidas, ocultas y guardadas en las gavetas de sus recuerdos, extraídos súbitamente de sus archivos de resentimientos para ser cobradas sin piedad a la hora de las venganzas. Nadie se salvará de la mano inmisericorde y miserable del vengador absoluto, todos estamos expuestos al albedrío escrutador de su mente todopoderosa, el oráculo mayor dará pronto su inapelable veredicto.

Se confunden los sueños difusos con los ilusos y precarios objetivos, se soslayan las pasadas glorias de los próceres, que amotinados en el bronce de las estatuas, desde las pálidas y tétricas plazas públicas permanecen inmutables ante la difamación proferida con saña, por el gendarme sin mancha. Sombras lúgubres lo arropan todo con su torrente de oscuridad; nadie se sorprende ante el incontenible torrente, que fluye de la mítica garganta difusora interminable, de una incendiaria voz que nos resuena mensajes, cuando sin medida nos pronuncia el oráculo predestinado que nos regaló la historia, ruidos convertidos en fácil costumbre, en pestilente olor que envuelve la brisa y contamina la existencia. El sonoro delirio masivo congestiona pantallas y papeles coloridos, que descubren un ambiente lleno de rutina y hastío, agobiante desazón, desaliño, aliento fúnebre, sabor amargo que se irradia presuroso por comarcas y parajes; los seres gastados se familiarizan con la trama truculenta que los agobia.

Trastocadas las conciencias, enrojecidos los ojos, entumecidos los cerebros; mansos en apariencia pero rabiosamente disconformes, los patéticos personajes de esta historia inconclusa contienen su ira, como maniquíes moldeados se aferran a sus esperanzas pérdidas, a los sueños enterrados, a sus odios inhumanos, a febriles memorias que estremecen sus labios resecos, que los mantienen oxidados, inmóviles, sin intención de trasladar un solo hueso; manteniéndose distantes, alejados, presos de una vana ilusión pasajera; miran al cielo, claman auxilios, ayudas ausentes que no vendrán de ninguna parte; ni agua les lanzan las grises voladoras gaseosas, flotando en el aire contorsionando lentamente sus figuras corrugadas con el telón de fondo azulado; sólo las polvorientas calles soportan el tieso sonido que despiden los pasos apresurados, de los transeúntes perturbados, que invaden espacios y tiempos; allí están pululando sedientos de algo que no saben que es, la mayoría aleteando sus miserias entre aires y corrientes de cambio desenfrenadas, golpeando pasiones, motivando disputas, asechando con seguir quejándose de todo y obedeciendo a ciegas, sin detenerse un instante, pero siendo siempre los pretextos usados, las espléndidas causas de divisiones y grandilocuentes planes emblematizados en aburridos discursos .

La imaginación florida, se expande por doquier, milagros, trampas, y brincos se aprenden como conducta adquirida; se sabe rugir, cual felinos guerreros se enfrentan por sus apetencias, imponen hábitos, entremezclan placeres, amores y odios; se liquidan entre si, compiten debatiéndose entre ideologías redentoras de pueblos, se sienten indoblegables, dolientes del mundo, sabios y dueños, semejándose a oráculos inmaculados; jamás tiemblan, ni quedan en evidencia, son los dioses, los nuevos salvadores, quienes nos liberarán de los efectos horrendos del festín del pasado; sabrán llevar sobre sus hombros nuestras pesadas cargas, nos sanearan, atenuarán o eliminarán nuestros vicios, defectos, egoísmos, avaricias, codicias, y decadentes debilidades e imperfecciones, ¡nos salvaremos!, nos aman demasiado, nos los merecemos, al fin nos llegaron, somos afortunadísimos de tenerlos aquí reunidos.

No engañan, no mienten, no manipulan, jamás se venderán por el metálico dinero, no serán seducidos por ningún imperio inmoral, jamás nos traicionarán, debemos confiar en ellos, entregarles nuestros destinos incondicionalmente, la honestidad es su ley, son únicos, no fallan, no están para errar, ni morir, vienen por todos, a querernos, a decirnos que hacer, como actuar, vivir y comer, se nos muestran radiantes en las noches por las ventanas de cristal brillantes y coloridas como bolas mágicas, ya no hay de que preocuparse han venido a quedarse para siempre, nos acompañarán hasta el fin de nuestros días, no es un juego ni falsa alarma, es verdad, al final de tanto trajín y sufrimiento tendremos a quien nos dirigirá hacia la luz esclarecedora de su sabiduría, ya no será necesario angustiarse, la vida nos premió, tendremos para siempre cortantes argumentos en las noches luminosas de fulgor resplandeciente, que harán olvidar a aquellas desoladas y oscuras épocas pasadas, ahora disfrutaremos por fin de una programación televisiva esclarecedora, nada dejará de ser inexplicable, tendremos el constante auxilio del oráculo que todo lo sabe, lo entiende, y lo explica correctamente, y en horario cómodo para apreciarlo en el hogar, o convenientemente verlo repetido, por si nos lo perdiéramos, en la silenciosa madrugada, ¡qué deliciosa suerte tenemos!

! No habrá problema sin solución ¡ Los “inmaculados oráculos” nos aman y nos salvarán! Existen para entregarnos en las noches de oscurantismo primitivo y de programación imperialista, alienante, consumista, de transculturación capitalista salvaje, de los “lacayos canales privados”, sus luminosas presencias, brindarnos sus conocimientos infinitos, definitivos, únicos; encarnan la verdadera revolución educativa, serán “la moral y las luces” que todos necesitamos para salir del oscuro abismo de ignorancia en el que nos precipitó el imperio devorador, seremos como el “guerrillero heroico”, nosotros y nuestros hijos ya no estaremos más expuestos a ejemplos degradantes, se acabará la violencia, no más tendenciosas líneas editoriales, ya tenemos un modelo limpio y purísimo a seguir en la ventanita virtual, el oráculo inmaculado patentado por el “Imperator” haciendo uso con la avenía del oráculo en jefe y a discreción, de navajas oxidadas, muy amelladas que solo cortan su ego. ¡Salve César! pareciera decir servil, pero eso si, pálido y descolorido, carente de vida repite: “patria, socialismo o muerte”

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Este post es poco convencional.En realidad desconcertante, porque rompe con los esquemas."El oráculo" podría ser cualquiera en el mundo que se crea con derecho a dirigir la vida del resto de la humanidad.

La Gata Insomne dijo...

Arcángel
yo no puedo venir aquí todos los días porque salgo echa polvo!!!!
Todo lo que dices es tan cierto, y yo, al menos, me siento paralizada, rabiosa, impotente.

No creo en oráculos desde que el de Delfos desapareció.

Mi únoco oráculo es mi corazón.... y ahora esta apagado


Luego sigo leyendo los posteriores, me voy a vivir..."un día más, porque hay que trabajar y vivir, ahora no entiendo mucho para qué.

Saludos

Arcangel Vulcano dijo...

Tampoco creo en oráculos, sólo en Dios, que está en tu corazón y en el de todos los seres humanos.

Si tu corazón se encuentra temporalmente "apagado" simplemente enciéndelo de nuevo comprendiendo que Dios está dentro de él.

Vivir es un regalo de Dios que no podemos desaprovechar de ningún modo. Cada vez que late tu corazón Dios se manifiesta en tu vida.

Respetada gatita trasnochadora,nada te puedo sugerir para aliviar de angustía o ansiedad a tu alma, que tú ya no sepas por tu propia experiencia; sin embargo, algo que suelo hacer para levantar mi ánimo cuando me encuentro decaído es un ejercicio muy sencillo:

º-Piensa en que en este momento hay millones de seres humanos ocupando las camas de los hospitales esperando la muerte enfermos y desauciados padeciendo una enefermedad mortal; pero a ti nada te duele, ni siquiera tienes un simple dolor de cabeza.
º-Piensa en que en este instante al menos un niño en el mundo está muriendo de hambre, mientras tus hijos y familiares pueden comer (gracias a Dios).
º-Piensa en que en varios países están en plena guerra,generando diariamente cientos de víctimas inocentes, niños, mujeres, hombres y ancianos que pierden la vida absurdamente; gracias a Dios aún nuestro país disfruta de la paz.

Finalmente; camina frente a tu casa, parate un instante frente al mar, respira profundo, mira a tu alrededor, ¿dime que ves?...Ahora trata de responderte: ¿por qué está apagado tu corazón?...

Besos.