miércoles, noviembre 18, 2009

"¡A la guerra con totumas y velas!"


POR:MANUEL ROSALES.

Los nuevos anuncios de una supuesta guerra contra nuestro pueblo hermano de Colombia, han indignado y provocado una reacción generalizada de rechazo en el pueblo venezolano. Irritación y rabia de la gente que padece en carne propia la calamidad de vivir en un Estado poderoso y rico, pero lleno de pobres, con una clase media que se desmejora a diario y donde la vida no vale nada.

Guerra, violencia, armas y palabras subidas de tono es la respuesta a los graves problemas que se empinan en la sociedad venezolana, es la manera depravada con la que pretenden esconder el fracaso y la desastrosa administración del gobierno que en diez años desapareció, despilfarró y regaló más de 950 mil millones de dólares .
El anuncio de una “supuesta” guerra es la manera más cínica de burlarse del pueblo que está exigiendo una verdadera batalla contra la delincuencia, contra la pobreza, contra los malos servicios.

Es una ofensa y un latigazo al rostro del pueblo invitarlo a un enfrentamiento bélico cuando cuentan con malos salarios, están desempleados y desvelados porque no pueden enviar a sus hijos al colegio o no tienen como atender al familiar enfermo.¡Que cachaza! convocan a la guerra y no hay agua, vivimos de apagón en apagón, con una marcada escasez de alimentos. La canasta básica ubicada en 4200 Bs. y la alimentaria en más de 1900 Bs. Vamos a una supuesta guerra con totumas, velas y linternas, llenos de mentiras y promesas desde hace casi 11 años, una guerra en medio de más pobreza, desnutrición, mala calidad de vida y hambre.

Nuestro futuro se pierde en medio de la violencia de una inepta administración, que juega con la paz de dos naciones y no ha sido capaz de derrotar a las mafias, ladrones, sicarios, traficantes de drogas, paramilitares y delincuentes en general que caminan libres por las calles de nuestro país y de la guerrilla ni hablamos porque son los consentidos de la casa gubernamental.

Es la hora de la patria, tenemos una gran tarea por adelante: el reto de lograr un verdadero cambio, con nuevo espíritu de patriotismo y lucha; avanzar como un sólo pueblo con la firme decisión de sanar las heridas y las marcas que impiden nuestro progreso, nuestra libertad y la oportunidad para lograr nuestra superación; borrar para siempre la idea obsoleta de convertir al pueblo en una masa pobre, aplastada bajo la represión y mando de un grupo de vivos y privilegiados.

La alternativa democrática crece y se fortalece en la construcción de un nuevo proyecto de país, un cambio radical y la modernización del funcionamiento del Estado. Vamos rumbo a la ruptura del modelo de atraso violento que se ha convertido en una tragedia para la inmensa mayoría.

¡Todos a ocupar nuestro puesto de lucha!

1 comentario:

Anónimo dijo...

Marianella Salazar
El Nacional / ND

Lo que viene es joropo
Noviembre 18, 2009
La falta de dólares y la renuencia de las navieras a tocar puertos venezolanos para evitar robos y pérdidas gigantescas, debido al caos administrativo, lograron lo inimaginable: La Guaira, que por esta época del año siempre estuvo abarrotada de buques, parece un pueblo fantasma. Cartagena ha sustituido de manera definitiva los puertos venezolanos, generando aún más retrasos en los tiempos de importación comercial en Venezuela, con el agravante del congelamiento de las relaciones comerciales con el vecino país, que ha paralizado compras ­medicinas, entre ellas­ por 6 millardos de dólares.

La caída de las importaciones se notará fuertemente para el primer trimestre de 2010, cuando lleguen a su fin los pocos inventarios de cualquier rubro comercial. Ni por mar o tierra llegan los artículos necesitados, tampoco los alimentos que dejamos de producir desde que el Gobierno quebró ­deliberadamente­ la industria nacional y llevó a los productores agropecuarios a la miseria, a pesar de que este es un país extraordinariamente dotado por la naturaleza para producir en abundancia.

Misión Aduana. La nacionalización de las almacenadoras, en manos del todopoderoso Diosdado Cabello, ha disparado la matraca y los robos de la poca mercancía importada que llega a duras penas. Se ha disparado una versión sobre la suerte que correrían miles de agencias aduanales, con una presunta nacionalización para centralizarla ­según el modelo cubano­ en una sola megaagencia del Estado.

Sería la puesta en marcha de las mil veces anunciada libreta de racionamiento del siglo XXI, aunque se viene implantando con el bloqueo comercial que prohíbe la importación de productos colombianos, un hecho sin precedentes cuyos efectos son equivalentes a los que produjo el bloqueo estadounidense en Cuba, en 1962, que obligó a racionar drásticamente el consumo con la “cartilla” de racionamiento; aunque paradójicamente, Estados Unidos le suministra hoy más alimentos a la isla que cualquier otro país. Por lo pronto, cunde el terror en los puertos venezolanos, porque en fechas tan emblemáticas como ésta se encuentran vacíos y los importadores que lograron traer alguna mercancía son víctimas de la más descarada corrupción a manos de funcionarios y militares. Pareciera ser una política de Estado para generar un caos social que lleve al Gobierno a un control totalitario. A la contundencia de la carestía y los problemas sociales, los voceros oficialistas han comenzado a falsificar la realidad, dando explicaciones incoherentes como la pretensión expansionista del “imperio” a través de las bases militares permitidas por Uribe. Tendremos que comernos las hallacas con menos aceitunas y pasitas, y si permitimos que Chávez continúe monopolizando los poderes, sufriremos humillaciones en serie cada vez mayores y nos resultará imposible degustar nuestros platos navideños en la Noche Buena de 2010.

Tic tac

Con las tablas en la cabeza: ante el rotundo fracaso del boicot a las elecciones hondureñas y del regreso al poder de Manuel Zelaya, el Presidente venezolano sigue en su empeño intervencionista y ha enviado a El Salvador a un grupo de altos funcionarios de inteligencia, con la intención de sacar de Tegucigalpa al depuesto Mel Zelaya.



Exquisiteces diplomáticas: por primera vez en más de 30 años, el bazar navideño de Invedín (Instituto Venezolano para el Desarrollo Integral del Niño), asociación civil sin fines de lucro, no obtuvo el apoyo de la Embajada de Francia, que consideró los quesos y otras exquisiteces degustadas a diario por los ciudadanos franceses como un lujo para los venezolanos… tic tac

msalazar@cantv.net