domingo, mayo 24, 2009

"Oficinas que enferman" (Notas Útiles-Salud)


Notas Útiles
Salud.


"Oficinas que enferman"

"Tiritar de frío o trabajar en una silla incómoda no sólo hace mella en el rendimiento laboral, sino en la salud. Evelin Escalona, médico ocupacional, comenta algunas de las condiciones que más desgastan en estos ambientes".


¿Quién no ha llegado alguna vez de su oficina con la sensación de que le dieron una paliza? Al margen del estrés que podría generar cada trabajo, las condiciones físicas del ambiente laboral tienen una enorme ­y muchas veces desapercibida­ influencia en los niveles de fatiga tras ocho horas de jornada.

He aquí algunos gatillos de cansancio: Aire demasiado frío. Congelar- se en un ambiente que amerite bufanda o doble suéter no sólo resta concentración, sino que además agrede al cuerpo.

"Una temperatura apropiada para una oficina oscila entre los 19° y los 26° C. Con menos de eso, la gente puede experimentar incomodidad térmica y entumecimiento", explica Evelin Escalona, coordinadora del postgrado de Medicina Ocupacional de la Universidad de Carabobo y asesora del Instituto Nacional de Prevención, Salud y Seguridad Laborales (Inpsasel). "El frío puede ser causa de dolores musculares frecuentes en espalda, cuello y hombros, porque uno tiende a mantener el cuerpo tenso por varias horas. Si además ese aire acondicionado es muy seco, es probable que se irriten los ojos y las vías respiratorias superiores", señala. "El personal técnico debe ajustar la potencia y el recambio del aire según el tamaño de ese espacio y el número de personas que trabajan en él, así como graduar adecuadamente la humedad".
Exceso de ruido. No sólo quienes trabajan en una oficina caótica o una fábrica son víctimas del ruido; incluso los empleados de una tienda donde se escucha música a alto volumen durante toda la jornada pueden padecer efectos similares. "Cuando uno se expone a un nivel de ruido que supera el rango entre los 55 y 65 decibeles, puede experimentar una fatiga que al principio no se percibe, pero que es acumulativa.Si la oficina tiene un hilo musical, las melodías deberían ser relajantes, a un volumen moderado. Los equipos tampoco deberían hacer demasiado ruido. El ambiente ideal propicia la comunicación y la concentración".

Mala iluminación. Una luz deficiente o muy intensa puede provocar fatiga visual. "Las personas que trabajan con pantallas pueden sentir que los ojos se les irritan o resecan por falta de parpadeo, o pueden descubrir que tienen vicios refractivos que no son consecuencia de la computadora, pero que se hacen más evidentes en esa situación", señala la experta. Hasta los colores de los equipos influyen. Para facilitar la visibilidad, Escalona sugiere que son más recomendables los teclados claros en lugar de los negros, y que la superficie de las mesas debería ser de colores claros y mates. Las superficies brillantes ­como las mesas de vidrio, o la presencia de lámparas que rebotan su luz sobre el monitor­ producen deslumbramiento.

Mobiliario inadecuado. En trabajos de oficina, las condiciones deben procurar la máxima ergonomía. "Si se trabaja ocho horas sentado, la silla tiene que ser lo más ajustable posible: la altura del asiento debería poder graduarse para que los pies se apoyen sobre el suelo; el respaldo debe ceder hasta 110° o un poco más si la persona necesita estirarse. Debería tener posabrazos para que éstos no cuelguen si se trabaja con computadora, y para evitar una sobrecarga en cuello y hombros", aconseja. "La altura de la mesa y la posición del mouse pueden influir en la aparición de problemas como el síndrome del túnel carpiano, que se manifiesta sobre todo en las noches cuando la persona refiere una sensación de pesadez, frialdad, entumecimiento, dolor u hormigueo en las manos. Por eso las muñecas no deben estar muy extendidas ni flexionadas, sino en una posición neutra y alineada con el brazo".

Limpieza deficiente. En ambientes con aire acondicionado, los filtros necesitan una limpieza periódica, pues esa suciedad afecta sobre todo a quienes sufren de asma y alergias. "Eso también pasa cuando un trabajador se desenvuelve en un espacio con alfombras muy sucias o muebles empolvados, o trabaja con archivos muertos que acumulan hongos y ácaros". La presencia de plagas y malos olores son otras condiciones de insalubridad que deben reportarse.

Pausas necesarias
Buena parte de una óptima salud ocupacional consiste en practicar buenos hábitos de trabajo. La ergónoma y médico ocupacional Evelin Escalona aconseja hacer pausas y ejercicios de estiramiento cada 60 ó 90 minutos. "Eso incluye acciones tan sencillas como pararse para tomar agua o ir al baño.

Caminar ayuda a que los músculos se estiren y se relajen, agiliza la circulación de las piernas y contribuye a prevenir las várices cuando uno está mucho tiempo sentado en la misma posición. Por otro lado, las vendedoras de una tienda ­que generalmente pasan bastante tiempo de pie­ también deben contemplar pausas para descansar las extremidades inferiores.

Hay rutinas de gimnasia laboral que consisten en ejercicios de estiramiento y relajación", señala la experta. "Si se trabaja mucho con computadoras, cualquier descanso sirve para reposar la vista al enfocar otras distancias".

¿Qué dice la ley?
Según el artículo 70 de la Ley Orgánica de Prevención, Condiciones y Medio Ambiente de Trabajo (Lopcymat), "se entiende por enfermedad ocupacional a los estados patológicos contraídos o agravados con ocasión del trabajo o exposición al medio en el que el trabajador o la trabajadora se encuentra obligado a trabajar, tales como los imputables a la acción de agentes físicos y mecánicos, condiciones disergonómicas, meteorológicas, agentes químicos, biológicos, factores psicosociales y emocionales, que se manifiesten por una lesión orgánica, trastornos enzimáticos o bioquímicos, trastornos funcionales o desequilibrio mental, temporales o permanentes".

Esta ley establece en su artículo 53 que el trabajador tiene derecho a ser informado antes de iniciar su actividad sobre las condiciones en que ésta se va a desarrollar, la presencia de sustancias tóxicas, los daños que éstas puedan causarle y las medidas para prevenirlos; quienes estén expuestos a mayores riesgos deben ser provistos de los debidos equipos de protección.

También señala que los trabajadores deben recibir formación teórica y práctica, "suficiente, adecuada y periódica", sobre la ejecución de las funciones inherentes a su actividad y la prevención de accidentes y enfermedades ocupacionales. Legalmente, un trabajador puede rehusarse a laborar bajo condiciones inseguras si tiene motivos razonables para creer que existe un peligro inminente para su salud o su vida, sin que ello pueda considerarse como abandono de trabajo.

Fuente:http://impresodigital.el-nacional.com/todoendomingo/

1 comentario:

Zayi Hernández dijo...

BUENO... LO QUE PASA ES QUE LAS LEYES SE HA VISTO, QUE ESTÁN HECHAS PARA NO CUMPLIRSE...Y SI TE QUEJAS, TE ECHAN A LA CALLE...(AQUI), ALLÁ NO POR LA INMOVILIDAD, PERO IGUALITO, HAY INMOVILIDAD PARA ALGUNOS SECTORES, PARA OTROS ( LOS DE ELLOS) NO...
BESITOS.