jueves, julio 24, 2008

"Nueva Crisis de los Misiles"


POR:ENRRIQUE PRIETO SILVA.

Creemos que ha llegado el momento de ponerle el nombre a las cosas y de cortar por lo sano las aventuras de Chávez. No podemos seguir lamentándonos de la desidia del TSJ, de la FGR y de la AN, quienes siguen demostrando, a mas de incapacidad en su desempeño, una severa, grave e ignorante equivocación con los “juegos” de Chávez. Está bien que políticamente no descuidemos ni ignoremos el proceso electoral que se avecina, ya que el error de la abstención no puede volver a hipnotizarnos, porque “el proceso”, que ha sido ninguno, pareciera que solo existiera en los que han creído en las mentes prodigiosas, capaces de programar una nueva historia. De seguir así, volveremos a la prehistoria sin derecho al arrepentimiento.

No podemos dejar que el maleficio discurra, pero simultáneamente tenemos que dejar que la orina fluya y que los órganos del verraco nutran nuestras mentes, porque la cosa es seria y la pelea es peleando. ¿Creen que estamos elucubrando? Basta ya de creer en pajaritos preñados y de esperar a que la abuela para el apaciguador de este loco de carretera.

¿Recuerdan ustedes la Crisis de los Misiles en Cuba? Es posible que muchos jóvenes políticos, que hoy con pleno derecho estén haciendo campaña para una gobernación o una alcaldía, no se hayan enterado bien de lo que ocurrió en 1962, cuando la URRSS instaló misiles en Cuba, por lo que el presidente John Fitzgerald Kennedy amenazó con represalias nucleares y los soviéticos retiraron los misiles a cambio de la promesa de aquél de no invadir Cuba. Bueno muchachos, ¿Oyeron ustedes el discurso de “nuestro” presidente ante el presidente de Rusia? Pareciera un reprís de la aventura propugnada por Fidel, quien evidentemente está detrás de su títere venezolano. Es ahora a Venezuela a quien piensan invadir, y en el juego pareciera que Rusia le siguiera el juego, aprovechando la estúpida osadía de Bush de promover un nuevo escudo misilístico similar al de la guerra de las galaxias que, solo tuvo su freno en el MAD (Máxima Defensa Asegurada) por el temor a la destrucción mutua.

En aquello momento, superada la crisis cubana, los soviéticos sufrieron el descalabro cuando los dirigentes chinos se separaron de Moscú y los europeos del Este comenzaron a mostrar su descontento. El nacionalismo demostró ser más fuerte que el comunismo. Mientras tanto, Estados Unidos estaba luchando en la guerra de Vietnam en un fallido esfuerzo por conservar Vietnam del Sur y su superioridad económica de posguerra fue retada por Japón y Alemania Occidental.

Hoy el asunto no es menos tormentoso, peor, mas grave aún, cuando una locura se ha transformado en una estupidez política, en lo “ideológico” llamado “Socialismo del Siglo XXI” que aún no se sabe con que se come; y en lo militar: el pomposo nombre de “Nuevo Pensamiento”, que a decir del “filósofo de la Casa de los Sueños Azules” Alberto Müller Rojas, como percepción “es el enlace del deseo militar venezolano, partiendo de una supuesta liberalidad limitada al interpretar la declaración del presidente de los Estados Unidos Bush”. Consideramos, que este nuevo pensamiento militar está basado en una sola amenaza: “la intención de Estados Unidos de declarar la guerra a cualquier país del mundo enemigo y atacarlo”.

Vemos como militar, que estos cambios no obedecer ni se fundamentan en un Concepto Estratégico del Estado concebido por el poder político, que no existe, sino que parecieran fundamentarse en intereses ideológicos y proyectos ajenos a la esencia del componente militar venezolano, que con claros y evidentes anacronismos, conllevan a usarlo en funciones diferentes a la defensa, como lo establece la Constitución.

Contrariando a Müller en su concepción para la reforma constitucional, el pueblo dijo que “no existen guerras antiimperialistas y el concepto de guerra asimétrica ha sido caricaturesco y equivocadamente entendido” hasta en Colombia, como lo ha dicho Chávez en sus peroratas contradictorias, se ha demostrando su absurdo en luchas nacionalistas. Todo ello no es otra cosa que un emocional primitivismo para acercarse al armamentismo chocante con el deseo de paz y sosiego que es el reclamo como derecho constitucional.

Chávez en su desenfreno está volcando a Rusia hacia Venezuela, usando un discurso paradójico. Lucha porque USA no tenga bases en Latinoamérica, pero ve bien que sus socios del “socialismo-comunismo” las instalen en Venezuela. Olvida el artículo 13 de la Constitución:”El territorio no podrá ser jamás cedido, traspasado, arrendado, ni en forma alguna enajenado, ni aun temporal o parcialmente, a Estados extranjeros u otros sujetos de derecho internacional.

El espacio geográfico venezolano es una zona de paz. No se podrán establecer en él bases militares extranjeras o instalaciones que tengan de alguna manera propósitos militares, por parte de ninguna potencia o coalición de potencias…” Las tierras baldías existentes en las dependencias federales y en las islas fluviales o lacustres no podrán enajenarse, y su aprovechamiento sólo podrá concederse en forma que no implique, directa ni indirectamente, la transferencia de la propiedad de la tierra.

Creemos, que sin dejar de lado el discurso político y mucho menos el proceso electoral, hay que obligar a la FGR y al TSJ que cumplan con su deber. Toda esta conducta de Chávez es violatoria de la Constitución y lo califica de traidor a la Patria. El Código Orgánico de Justicia Militar venezolano contempla en su artículo 464, que se considera delito de traición a la Patria: “…3). Practicar actos de hostilidad contra un país extranjero que expongan a Venezuela a peligro de guerra, ruptura de relaciones diplomáticas, represalias o retorsión.” Y aunque no lo diga, todo lo que hace para una supuesta integración militar, entra en los supuestos de hecho y de derecho que configuran la traición al principio fundamental de alejarse de la paz y promover la guerra.


4 comentarios:

Anónimo dijo...

Otra provocación más
Editorial
http://www.analitica.com/va/editorial/9193099.asp

Miércoles, 23 de julio de 2008


Esto de ofrecer el territorio de Venezuela para el establecimiento de una base rusa (como lo reportó la prensa rusa aunque luego fue negado por las autoridades venezolanas) no es sólo un exabrupto de Chávez, una boutade para captar atención y sentirse importante; sino una maniobrilla para agitar las aguas en Venezuela e intentar una reacción que pueda mejorar sus perspectiva política, incluyendo provocar a militares que con toda razón deben estar altamente descontentos con esa muestra de sumisión a una potencia extranjera.
Al presidente le preocupa mucho que la oposición, a pesar de todos los obstáculos, esté logrando la unidad. Pero lo que más le angustia es que los venezolanos han decidido luchar por la vía democrática y rechazar las “soluciones” al margen de la Constitución, que tienden a favorecerlo. Por más provocaciones que el presidente haga, y seguramente vendrán otras, hay cada día menos adeptos a una solución mágica. El pueblo venezolano ha madurado y sabe que la única solución a los problemas del país es más democracia y menos aventuras. Ya hemos aprendido lo que ocurre cuando se de rompe el hilo constitucional y lo que sucede cuando se deposita toda la fe en un “Mesías”. La provocación a que hacemos referencia no sólo carece de factibilidad y es profundamente impopular, sino que retrata de cuerpo entero el aventurerismo e incoherencia del personaje, típica de su actual comportamiento. ¿Qué tiene que ver la potencial base y compra de sofisticados armamentos con la “guerra asimétrica”, que hasta hace poco era la supuesta doctrina de la “revolución”?

Hay que mantener la calma, hay que trabajar, empujar para lograr la unidad de la oposición, y conseguir un triunfo consistente en el mes de noviembre que le cierre el espacio a este experimento político que está llevando al país hacia un abismo. Cada día, a pesar del chorro petrolero, las perspectivas de la oposición mejoran. Por eso no caigamos en provocaciones, sean las que sean, y veremos como el país sabrá darle un alto a ese deseo de concentrar todo el poder en un solo hombre.

maelarrias dijo...

Epale Volcano, creo que hay que tratar esta información de forma conciente y delicada y no irse de bruces, he visto los videos de la rueda de prensa y Chávez nunca habló de bases militares, aunque si de barcos de guerra, aunque pensándolo bien, al final, en términos prácticos y armamentísticos terminaría siendo lo mismo.
Comenté este caso dándole importancia al "pelón" informativo, pero no se me había ocurrido el efecto similar de barcos rusos en costas venezolanas relativamente cerca de EEUU.

Arcangel Vulcano dijo...

En efecto Manuel,así es, también vimos y escuchamos tal discurso, y pensamos que los medios adversarios hacen el juego político y manipulan parte de la información, lo que es inaceptable y ciestionable...sin embargo, pensamos, que el Sr Chávez es quien se ha ido de bruces y ha dado el mal ejemplo en eso de manipular; son muy obvios los torcidos objetivos políticos que persigue en esa aparente carrera armamentística que parece haber emprendido; sería ilusorio pensar que tales actitudes no tengan un impacto y la debida y oportuna respuesta de sus jurados enemigos gratuítos.Pero Chávez parece que está absolutamente desfasado, más aún en el actual escenario geopilítico mundial, porque Rusia dista años luz de ser la antigua Unión Soviética; pero además, no calza los zapatos de Fidel. Para nosotros, él es una suerte de oficiante mediocre o mago de circo de quinta categoría que pretende ejecutar números pateticamente repetidos,sin sorpresa, sin ninguna gracia. Ahora, que el tema que plantea el autor del artículo aquí exhibido, (militar de carrera) es muy delicado,y el verdadero trasfondo de este oscuro y delicado asunto no es precisamente el de montar o no bases militares; lo que cuenta son las raras intenciones, las motivaciones ocultas y el cinismo con el que lo hace...pero ni los venezolanos, ni los rusos, pero tampoco los estadounidenses, ni los judios, ni los colombianos somos estúpidos, y menos mochos, el "imperio existe y es maluco! (dice el amigo rafael Poleo)...¡ay de aquellos que lo piensen!estarían orinando fuera del pote.

Un fraternal saludo

Fran Invernoz dijo...

Coincido con Miguel Ángel Arrias en el sentido de que lo cierto es que Chávez habló de comprar armamento. Otra cosa son las especulaciones de los medios informativos generalistas que puedan estar bajo la influencia de determinado intereses. Chávez sigue siendo un pato criollo, como dice en Argentina, defeca en cada paso que dá.