sábado, agosto 23, 2008

"Estos generales derrotaron al socialismo".


POR:FAUSTO MASÓ.

Al socialismo lo derrotaron General Motors, General Electric y General Foods. Al espectacular discurso del socialismo sobre la solidaridad humana, el capitalismo respondió con pantalones, carros, neveras, abundantes alimentos.

En Venezuela, ¿a la luz de una vela dan ganas de votar por Chávez? Cuando en un cibercafé de Catia no funciona Internet, ¿los usuarios creen en las ventajas de la estatización de la Cantv? ¿A un habitante de los estados andinos le preocupa más pasar 15 horas sin electricidad o una catarata de leyes? ¿A un vecino de San Juan lo amenaza más la montaña de basura en las aceras o la separación de poderes? Con leyes y sin leyes Chávez hará lo que le venga en gana, las quiere como una hoja de parra. El famoso artículo 350 no se incluyó en la Constitución para bendecir una rebelión en su contra, sino para legalizar a posteriori el 4 de febrero. Chávez está pidiendo el voto a favor de Chacón en Petare con la promesa de enviarle recursos. Willian Lara en el Guárico afirma que si a un elector se le estropeó la nevera por un apagón, él como gobernador le comprará una nueva.

Chávez sigue intentando identificarse con los pobres y acusar a la oposición de representar a los ricos. El chavista más chavista que relacione los apagones con la estatización de la electricidad, las fallas de la Cantv con el Gobierno no votará por el PSUV. Al chavista que ya votó contra el Presidente en el referéndum, qué lo moverá ahora, ¿alguna razón jurídica o algo tan exasperante como los apagones? ¿Qué interesa más, la ley de agua, el artículo 999 de la Constitución o la luz eléctrica? Chávez públicamente se compromete a que haya corriente eléctrica; la oposición se engolosina con leyes y decretos como si fuéramos suizos... En una encuesta clandestina los cubanos confesaban algo predecible: su deseo de arreglar sus hogares, comprar un televisor, no de ejercer el derecho al voto. En China y en Vietnam la prosperidad económica ha justificado ante sus habitantes el despotismo de sus gobiernos. Ok, vale la pena presentar recursos de inconstitucionalidad, quejarse en la OEA o en la corte celestial, con tal de colocar en primer plano las cosas que agobian al ciudadano común.

Si los chavistas comprenden que los servicios públicos funcionan pésimamente por culpa de sus gobernadores y alcaldes ocurrirá un tsunami electoral. Nadie vota a la luz de una vela por un candidato oficial, pero si dejamos que Chávez sea el que prometa las soluciones mientras la oposición se concentra en la ley acuática, ganará las elecciones el peor gobierno del siglo XX y del siglo XXI. Hay a la vez que mascar chicle y caminar. Eso sí, hay que dejar de disparar a escondidas contra la propia oposición, hablar de unidad y no apoyar al candidato unitario. Chávez maniobra pero ya no cuenta con el poder de los primeros tiempos. ¡Lleva 10 años en Miraflores! Además por ahí andan merodeando los candidatos presidenciales del chavismo. Son varios.

1 comentario:

Anónimo dijo...

gilbert

Me parece un muy buen análisis y una verdad grande como el universo.

Sí, hay que denunciar los atropellos donde sea, pero el pueblo le interesa la papa, la vida concreta, la inseguridad, la falta de trabajo, el desastre de los hospitales, ver como sus aspiraciones para una vida mejor se le está truncando.

Muy bien la llamada de atención para que la oposición no se tire trapos sucios. La cacareada y lograda unidad debe ser de verdad.

Eso va para William, Arocha, Azócar, Do Nacimento, Liliana y Graterón.....

Escuchen al pueblo, vean sus necesidades y a mostrar a la gente que este desgobierno que no ha hecho nada en estos 10 laaaaaaaaaaaaargos años tampoco va a poderlo hacer. Que sus promesas siguen siendo promesas. Una vez al "socialismo" tenía como emblema "el sol del porvenir" "la aurora", pero que nunca el sol ha nacido ni ha calentado a los pobres.

El 350 es vedadero en la medida en que un "TSUNAMI" de votos contra el desgobierno del teniente coronel GOLPISTA se ralice el 23N, a pesar de todas las voces agoreras.

PRENDAMOS de una buena vez.