sábado, diciembre 15, 2007

"La Asamblea Nacional venezolana pasa parte de la reforma de Chávez"


POR: CASTO OCANDO

A dos semanas de que su proyecto socialista fuese derrotado en un referéndum consultivo, el presidente Hugo Chávez logró convertir en ley un plan maestro que incluye al menos dos de los polémicos aspectos incluidos en su fallida propuesta de reforma constitucional.

La Asamblea Nacional (AN) de Venezuela dio el jueves su aprobación final a un plan de desarrolllo económico y social que prevé el establecimiento de un ''modelo productivo socialista'', y el surgimiento de una ''nueva geopolítica nacional'' que plantea ``una modificación de la estructura territorial del país''.

La propuesta de un modelo socialista de producción apareció como una renacida versión del artículo 112 del derrotado proyecto de reforma constitucional avalado por Chávez. El tema de la nueva geopolítica nacional fue incluido en el artículo 16 de la reforma.

El disidente partido Podemos se abstuvo de votar argumentando que el plan de desarrollo no se había difundido con suficiente tiempo, pero la presidenta de la Asamblea, Cilia Flores, aclaró que había sido presentado originalmente en la AN por el presidente el 28 de septiembre pasado, cinco semanas después de dar a conocer su proyecto de reforma constitucional.

La aprobación del plan no produjo una reacción inmediata de la oposición ni del sector estudiantil, pero sí generó críticas entre expertos constitucionalistas.
''La Asamblea Nacional está aprobando leyes como si la reforma constitucional hubiese sido aprobada'', dijo Tulio Alvarez, un abogado constitucionalista opuesto al gobierno de Chávez.

Alvarez calificó la aprobación del plan de desarrollo de la nación de ''una aberración jurídica'', pues una vez derrotada la reforma constitucional no es posible jurídicamente presentar por segunda vez los mismos puntos en un mismo período de gobierno.

El experto pronosticó que el mandatario venezolano ''va a tratar de convertir en leyes todos los puntos que se plantearon en la fallida reforma constitucional'', menos la reelección indefinida.

El plan de desarrollo abarca un total de siete directivas destinadas a ''la construcción de una estructura social incluyente'' basado en la ética socialista, así como ''un nuevo modelo social humanista y endógeno'', explicó el diputado oficialista Ricardo Sanguino en la sesión parlamentaria donde se aprobó el plan el jueves por la noche.

''Se persigue que todos vivamos en condiciones dignas rumbo a lo que el libertador Simón Bolívar sostenía, rumbo a la suprema felicidad social'', indicó Sanguino, de acuerdo con un comunicado de la AN.

El nuevo plan, cuya versión final todavía no se ha publicado en gaceta oficial, plantea una concepción en la que la ''debilidad individual'' de la organización social es reformada por la ''fuerza colectiva'', ``reforzando la independencia, la libertad y el poder originario del individuo''.

El plan establece también que ``los espacios públicos y privados se consideran complementarios y no separados como en la ideología liberal''.

2 comentarios:

Arcangel Vulcano dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Anónimo dijo...

Braulio Jatar
Noticiero Digital

Vicepresidente Removido
Asamblea Nacional Disuelta

No son deseos, sino la lógica consecuencia política ante una nueva realidad que no se ve plasmada en una Asamblea unicolor, que ciertamente es el producto de la irracionalidad de un sector de la oposición, pero que ahora no tiene sostenibilidad política. Son muchas las razones que nos permiten pensar que lo que dijimos, de forma anticipada antes de conocerse el resultado del referendo improbatorio de la propuesta de reforma de la Constitución Nacional, ahora serán las secuelas lógicas, por inevitables, como producto de la nueva realidad política electoral

En artículos anteriores al 02 de diciembre, hablábamos de cómo el desempeño de Jorge Rodríguez estaba duramente cuestionado como vicepresidente, desde cuyo cargo, nada pareciera haber aportado al Ejecutivo Nacional. De igual forma, el trabajo realizado como Coordinador Nacional del PSUV, no cristalizó ni en número reales (en el referido votaron menos que lo que nos dijo era la base militante) ni en el cumplimiento de la formalidad de registro, ante el Consejo Nacional Electoral, del partido todavía en “proceso de formación”. Ahora con la derrota refrendaria deberá, como Jefe del Comando Zamora, sufrir las consecuencias del derrotado en el campo de la batalla electoral.

La Asamblea Nacional de un solo signo político, dejó al descubierto su ineficiencia y su subordinación del Poder Ejecutivo, de tal forma que Heinz Diterich, a quien nos lo han presentado como un sólido ideólogo internacional de la propuesta del Chavismo, escribió un artículo en Aporrea en los siguientes términos: “…El parlamento (Asamblea Nacional) es, esencialmente una caja de resonancia de la voluntad presidencial donde los diputados, controlados por tres “capataces”, dicen “sí” a todo lo que él plantea, aunque sea inviable. La responsabilidad de esta situación reside en parte considerable en los diputados oficialistas, que no quieren perder sus prebendas….”

La solución a la crisis de estabilidad política que se avecina, no es ni tan siquiera la llamada reconciliación. Lo mas acertado es hablar de relegitimación. El Presidente tiene que reconocer la existencia de un sector que se opone a su propuesta y por el otro lado, los opositores tienen que reconocer como legitimo al poder constituido y éste último tiene que ser edificado sobre una nueva realidad en sintonía con el resultado del referendo popular.

En consecuencia de lo anterior, advertimos que existe una vía constitucional que haría posible el cumplir con las dos metas inmediatas, como es la salida del vicepresidente y la disolución de la Asamblea Nacional y lo encontramos en el articulo 240 de la CNRVB cuando señala: “…La remoción del Vicepresidente Ejecutivo o Vicepresidenta Ejecutiva en tres oportunidades dentro de un mismo período constitucional, como consecuencia de la aprobación de mociones de censura, faculta al Presidente o Presidenta de la República para disolver la Asamblea Nacional. El decreto de disolución conlleva la convocatoria de elecciones para una nueva legislatura dentro de los sesenta días siguientes a su disolución….”

La oposición de cara a los resultado electorales recientes, tiene derecho a ocupar su espacio natural para el debate político. La Asamblea Nacional es el foro por excelencia para que se produzca un debate ideológico para beneficio del país y la entidad llamada a controlar la gestión del Ejecutivo Nacional. Si no le abrimos espacios a la oposición, ésta tomará otras vías de expresión, y será las interminables protestas de calle y otros mecanismos los protagonistas de una escena indeseada para la gobernabilidad y los elevados intereses de la Republica.