viernes, octubre 03, 2008

Paquete financiero de rescate de Bush aprobado por la cámara baja del Congreso de EEUU.


POR:JULIE HIRSCHFELD DAVIS Y DAVID ESPO.

Congreso aprueba histórico paquete de rescate financiero

La presidenta de la cámara baja, la demócrata Nancy Pelosi, dijo que el proyecto de ley es necesario "para comenzar a moldear la estabilidad financiera de nuestro país y la seguridad económica de nuestro pueblo".

WASHINGTON --Con la economía al borde del abismo y faltando pocas semanas para las elecciones, el Congreso aprobó el viernes un paquete de rescate financiero por 700.000 millones de dólares y lo envió al presidente George W. Bush, quien dijo que lo sancionará rápidamente.

La votación en la cámara baja por 263 a 171 coronó una quincena turbulenta en el Congreso y Wall Street, con advertencias diarias de que el país enfrentaba la crisis económica más grave desde la Gran Depresión si los legisladores no aprobaban el paquete.
"Todos sabemos que nos encontramos en medio de una crisis financiera", dijo el líder de la bancada republicana en la Cámara de Representantes John Boehner, poco antes de depositar su voto a favor de la intervención federal en los mercados de capitales privados, algo que sólo hace un mes era impensable.
"Y sabemos que si nada hacemos, esta crisis seguramente empeorará y nos colocará en una recesión económica que la mayoría de nosotros nunca ha experimentado".
La presidenta de la cámara baja, la demócrata Nancy Pelosi, dijo que el proyecto de ley es necesario "para comenzar a moldear la estabilidad financiera de nuestro país y la seguridad económica de nuestro pueblo".
Las acciones subieron en Wall Street, donde muchos aguardaron con ansiedad la votación, aunque los inversionistas tuvieron que encarar un informe negativo sobre el mercado laboral. El Departamento del Trabajo dijo que las empresas suprimieron 159.000 empleos en septiembre, la mayor reducción en cinco años y una prueba más de la contracción económica.
Incluso antes de que la medida fuera aprobada por el Congreso, la Casa Blanca intentó enfriar el optimismo sobre el impacto inmediato que tendrá en la economía. "Esta legislación es para arreglar un problema en nuestros mercados financieros", dijo el vocero Tony Fratto. "No es para dar un impulso a la economía, sino para evitar una crisis en nuestra economía ... Si funciona como esperamos, comenzará a manar nuevamente el crédito".
La votación en la cámara contrastó con la del lunes, cuando fue derrotada una versión similar, en parte debido a la oposición republicana.
Los líderes del Senado se apresuraron a incluir 110.000 millones de dólares en exenciones fiscales y nuevas subvenciones para obtener respaldos adicionales, especialmente en lo referente a la salud mental. la versión revisada fue aprobada por la cámara alta el miércoles por la noche, por 74-25.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Fin del capitalismo ¿Cuál capitalismo?
por Larry Nieves

El surgimiento de la crisis financiera como principal tema noticioso en las últimas semanas ha causado la emergencia de nuevos vaticinios del fin del capitalismo por parte de los liberticidas de costumbre. Hugo Chávez, desde luego, no ha perdido la oportunidad de criticar al capitalismo imperante en los Estados UNidos y culpar al libre mercado de los males que actualmente aquejan al mundo financiero global. Desde Lisboa, Chávez decía el pasado 27 de septiembre:

Hay que ir a la raíz de las cosas, porque para mí está muy claro que el fondo del problema está en el sistema político imperante en los Estados Unidos, el capitalismo y liberalismo, y la tesis de la mano libre del mercado, que ha generado la ruina.

¿Pero cuál capitalismo? Como he escrito ya varias veces en esta bitácora el capitalismo de libre mercado es un sistema económico en el cual el estado no interviene en las transacciones y contratos acordados voluntariamente entre individuos e instituciones, es decir, un sistema en el que las decisiones económicas no dependen del estado.

Lo que tenemos en Estados Unidos no le llega a los talones, ni siquiera a una definición mucho más relajada de libre mercado. De hecho, la única forma en la que usted podría afirmar que el sistema imperante en los Estados Unidos es el capitalismo de libre mercado es si usted revierte el significado de la palabra "libertad" para que signifique exactamente lo contrario, al estilo orwelliano de Libertad es Esclavitud.

¿Cuáles son las intervenciones gubernamentales que directamente han causado la presente crisis financiera global?

La primera, más importante y fundamental intervención del gobierno en la economía es la intervención en el sistema monetario. Muchas veces he escrito sobre este tema. En un sistema monetario de libre mercado, el dinero está fuera del control de los políticos, es decir, la cantidad de dinero circulante y su forma es determinada por las preferencias de los consumidores. Históricamente, durante miles de años, los consumidores han elegido el oro y la plata como formas de dinero. La libertad monetaria fue abolida luego de la Segunda Guerra Mundial a nivel mundial y en los Estados Unidos luego que Richard Nixon cerrara la "ventana del oro" (la convertibilidad del dólar en oro) en 1971. ¿Qué importancia tiene esto en el mercado? Sencillo: sin ningún "ancla" de valor, los políticos pueden crear dinero (inflación) de la nada a voluntad. Ya que los políticos siempre querrán gastar más de lo que es responsable gastar, inevitablemente el poder de crear dinero será abusado tarde o temprano. Esa es una intervención en el libre mercado.

Relacionada con la anterior, luego del desinfle de la burbuja de las "punto com" durante los años 2001-2003, el gobierno de George Bush trató de evitar una recesión. El método elegido fue bajar las tasas de interés a corto plazo desde 6,50% hasta 1% entre mayo de 2000 y junio de 2003. Las tasas de interés a corto plazo son fijadas por el banco central (una institución del gobierno) y la única forma de bajar las tasas de interés artificialmente es creando más dinero. Más dinero circulante significa que el costo de pedir dinero prestado (las tasas de interés) es más bajo. Esta es una intervención del estado en la economía.

Relacionada con la anterior intervención, los políticos decidieron en esa época (a principios de la década) que era cool ser dueño de una casa y que no hacia falta ahorrar para comprarla. Normalmente si usted quiere comprar una casa o un apartamento, usted debe ahorrar durante años y años para poder pagar una inicial. El resto se lo presta el banco y durante años y años usted debe pagar la hipoteca. Pero como la democracia es maravillosa y la voluntad del pueblo es que todos tenemos el derecho humano a una casa, los políticos decidieron que iban a conceder el deseo. La forma de hacerlo fue permitiendo y estimulando la relajación de los estándares que los bancos usaban para decidir el otorgamiento de préstamos. Por ejemplo, ya no era necesario pagar una inicial, ni demostrar que el deudor tenía alguna fuente de ingresos que garantizara el pago de la deuda y cosas por el estilo. Además, como la democracia debe favorecer a los más pobres, los políticos decidieron que los bancos debían prestar más dinero a aquellas personas pobres que lo solicitaran. Desde luego, siendo pobres, estas personas no podían pagar las hipotecas que estaban contrayendo. ¿Pero qué importa? Mientras el banco central continuara bombeando dinero fresco, no había nada de qué preocuparse.

Tome en cuenta lo siguiente: en un mercado realmente libre de intervenciones estatales, en el que la masa de dinero es más o menos constante, un banco que decida tirar por la borda todos los estándares en el otorgamiento de préstamos y comience a extender crédito a diestra y siniestra a todo pordiosero que se presente en sus oficinas, rápidamente sería identificado por los analistas financieros y por sus mismos competidores (quienes no podrían estar todos inflando sus préstamos al mismo tiempo). Las acciones de este banco caerían rápidamente y los depositantes perderían la confianza y comenzarían a sacar su dinero de sus cuentas de ahorro, ante el temor que la irresponsabilidad y el exceso de riesgo que estarían asumiendo los directivos del banco, estaría poniendo al banco en riesgo de insolvencia. Y debido a que en un verdadero libre mercado no existiría una institución gubernamental como FOGADE, que supuestamente asegura los depósitos de los ahorristas (en los Estados Unidos la equivalente se llama FDIC), cada persona estaría obligada a ser más responsable cada vez que pone su dinero en un banco y la amenaza de una corrida bancaria sería mucho más latente que en la actualidad. Ante esta amenaza, los bancos estarían obligados a ser más conservadores y no expandir el crédito a lo loco como lo hicieron durante la última década.

Podría continuar por varios días enumerando las perniciosas intervenciones del estado en el mercado, pero no quiero extender mucho más este artículo.

Vuelvo y repito, lo que acá tenemos es una crisis del estatismo y del socialismo financiero, no del capitalismo de libre mercado. La presente crisis fue creada por variadas intervenciones del estado en un intento de corregir pasadas intervenciones que intentaron corregir las distorsiones creadas por intervenciones pasadas y así sucesivamente.

La solución, obviamente, no es continuar interviniendo, creando más problemas para que los políticos intenten solucionar más adelante. La solución pasa por atacar la raíz del problema, volviendo a un sistema monetario que no permita la inflación ad infinitum y que no proteja mediante garantías gubernamentales el comportamiento riesgoso de entes privados.

Sin embargo, lo más probable que suceda es que los políticos consigan alguna forma de continuar complicando el problema, así que es necesario pensar en cuáles serán las consecuencias de todo este desastre para los amantes de la libertad.

Pero esa es otra historia, para otro artículo más adelante.