domingo, febrero 19, 2012

"El contendor" ("...Henrique Capriles Radonski...lider de la oposición...sereno y optimista...una fórmula novedosa para enfrentar a Chávez...")




POR:JAVIER PEREIRA.

Sin cumplir 40 años de edad, Henrique Capriles Radonski está listo para convencer a los venezolanos de que llegó la hora de cerrar el ciclo socialista. El líder de la oposición ha vivido una intensa carrera política que lo ha transformado en un dirigente sereno y optimista: una fórmula novedosa para enfrentar a Hugo Chávez.


Un Hugo Chávez impecablemente trajeado y de mirada enérgica subió aquella mañana a la tribuna del Palacio Federal Legislativo, decidido a romper la tradición y sacudir los cimientos de la política venezolana. Juró sobre la Constitución a la que calificó de "moribunda", ofreció impulsar una nueva carta magna y se enfundó por primera vez la banda presidencial. Era el 2 de febrero de 1999 y a pocos metros del nuevo Presidente estaba un joven de 26 años de edad muy delgado, de pelo corto y orejas prominentes, que presenciaba en primerísima fila aquella ceremonia de investidura.

Era un rostro desconocido para la mayoría de los miembros del viejo Congreso Nacional, que lo escogieron presidente de la Cámara de Diputados por una sola razón: su cédula de identidad lo señalaba como el miembro más joven del Parlamento. El nombre de Henrique Capriles Radonski fue la llave que desbloqueó una durísima negociación entre las fracciones políticas opositoras, que no pudieron cerrar un acuerdo para designar a la nueva junta directiva hasta que Henrique Salas Römer, líder de Proyecto Venezuela, sugirió poner en manos del parlamentario más novato la responsabilidad de ser el conductor de un Congreso que tenía las horas contadas.

Después de 13 años, aquel muchacho de mirada perdida, que en 1999 se pasó por alto tomar juramento a uno de los directivos del Parlamento, se ha convertido en el líder del proyecto alternativo que pretende cerrar el ciclo del socialismo bolivariano que comenzó aquel martes 2 de febrero, el mismo día que arrancó su intensa carrera política.

Un mensaje. El recorrido electoral de Capriles es limpio y exitoso. En julio del año 2000 lanzó una campaña tradicional, enfocada en la seguridad ciudadana ("Cero tolerancia"), con la que logró desbancar a Ivonne Attas de la Alcaldía de Baruta con 63% de los votos. Cuatro años después selló su reelección con 78% de apoyo y un mensaje que clamaba por la movilización ("El voto es tuyo y Baruta también") en un entorno de desconfianza y apatía, después de la derrota opositora en el referéndum revocatorio. En 2008 asumió el difícil reto de desalojar a Diosdado Cabello de la Gobernación de Miranda y repitió la fórmula de 2004 con un eslogan positivo ("La fuerza del cambio eres tú"). Durante ocho años de experiencia política y tres victorias electorales, su mensaje evolucionó a un discurso cada vez más optimista y motivador, aunque falto de ofertas concretas.

En la campaña para las primarias presidenciales repitió la misma fórmula, pero con mayor complejidad. Se enfocó claramente en motivar al elector para revelar una nueva alternativa ("Hay un camino"), pero también incluyó tres ingredientes estratégicos que consolidaron su propuesta. Primero, se apropió del marco "progresista" para instalarse en un espacio programático centrista, que le permitió evadir el debate izquierda-derecha, escapar de las etiquetas habituales del relato oficial y construir eficazmente un contraste con el adversario. El segundo ingrediente fue la idea de renovación política, consolidada durante la última fase de las primarias, después de la alianza con Leopoldo López, y expresada en una frase que utiliza desde hace varios años: "Venezuela tiene más futuro que pasado". El tercer componente es la prioridad en la agenda social, anclada en dos temas clave: la educación como herramienta para superar la violencia y el empleo como el antídoto para remediar el hambre y la pobreza, ambas etiquetas amparadas bajo el paraguas del progreso. Esta es una estrategia de triangulación que no concentra su mensaje en las debilidades de la gestión oficial (inseguridad, inflación, expropiaciones), sino que busca competir con las fortalezas programáticas del chavismo.

El desarrollo estratégico de la campaña ha estado a cargo de su equipo de trabajo más cercano, en colaboración con algunos asesores externos para temas específicos como el brasileño Renato Pereira (publicista, director de la firma Prole y asesor del gobernador de Río de Janeiro, Sergio Cabral) y el equipo de la consultora Greenberg Quinlan Rosner (una firma de larga trayectoria en Estados Unidos, especialista en análisis de opinión pública y que ha trabajado con clientes como Bill Clinton, Tony Blair y, más recientemente, Mauricio Funes en El Salvador).

Un estilo. El camino político de Capriles ha estado sembrado de momentos críticos que han moldeado su liderazgo. Pasó de ser un hombre explosivo y enérgico ­como fue durante sus primeros años de alcalde­ a un dirigente sereno, de verbo directo y pausado.

Entre los momentos que han marcado la trayectoria del candidato unitario, 2 cobran especial relevancia: los 119 días que permaneció detenido en El Helicoide por el caso de la Embajada de Cuba a mediados de 2004 y las inundaciones que castigaron severamente al estado Miranda en diciembre de 2010. Sus colaboradores más cercanos reconocen que en prisión vigorizó su fe cristiana y su devoción a la Virgen del Valle, mientras que durante la emergencia en Barlovento se dedicó en cuerpo y alma a resolver la tragedia, se metió a vivir con la gente y de allí surgió un líder mucho más comprometido.

La evolución de su liderazgo también se ha visto influenciada por su formación. Abogado, con posgrados en Derecho Económico y Tributario, desde que asumió la Gobernación de Miranda reserva en su agenda una mañana a la semana para hacer cursos. "Hicimos varios ciclos de Historia de Venezuela y políticas públicas; éramos un grupo muy pequeño que se reunía a discutir sobre el país y el futuro", recuerda Armando Briquet, su jefe de campaña.

"Se trata de un líder que no se encarga sólo del día a día, sino que piensa a escala nacional".

Su consagración al trabajo es otro de sus rasgos característicos, reconocido por muchos de sus colaboradores más cercanos. "Es un hombre muy disciplinado, ha sido así desde que coincidimos en el Congreso Nacional", señala Julio Castillo, que fue el primer vicepresidente de la Cámara de Diputados en la directiva que encabezó Capriles. "Me ha sorprendido el instinto político que ha desarrollado y la madurez con la que trata los asuntos. Creo que ha adquirido el material para asumir el liderazgo que Venezuela ha puesto sobre sus hombros".

Después de recibir un baño de legitimidad de casi 2 millones de votos, Capriles sale de las primarias con mucha fuerza para afrontar un nuevo desafío, el más difícil de su carrera política: doblegar a la inmensa maquinaria oficial con un mensaje movilizador y un liderazgo conciliador. Una fórmula novedosa para enfrentar a Hugo Chávez.

Fuente:http://www.el-nacional.com/noticia/23245/23/El-contendor.html


ENTREVISTA | Henrique Capriles Radonski, candidato de la Unidad

"El insulto es el recurso de un boxeador agotado, grandote y pesado"

"Hay 18 años de diferencia entre los dos. Una generación. Le llegó el momento de dar el paso", estima. "Este no es un gobierno socialista y en él hay conductas absolutamente fascistas", considera el abanderado recién electo en un proceso de primarias.


POR:ROBERTO GIUSTI.


Henrique Capriles sonríe y le resta importancia a la pregunta obligada sobre los insultos. Prefiere hablar de otra cosa: "Lo mejor de todo esto es que él cree que va a ganar y entonces viene el tsunami y se lo lleva por delante. ¿Que qué le deseo? Larga vida porque quiero que vea, con sus ojos, los cambios que vendrán, desde el estancamiento y el atraso de hoy a la Venezuela del progreso".

-¿Te imaginas a Chávez poniéndote la banda tricolor?

-Eso me tiene sin cuidado. Mi sueño no es ese, sino que el pueblo me dé su confianza con el voto. Y si no lo hago bien, usted sabe qué hacer: me despide. Eso no lo ha entendido Chávez porque ha querido ponerse por encima de la gente.

-El calibre y tono de los insultos con que te ataca da la medida de la seriedad con que te toma en cuenta. Has desatado los demonios, te convertiste en un peligro y lo que puede ser un hecho positivo, te coloca en el centro de su mira. Eres un blanco.

-Para nada sorprenden los insultos. Es el camino escogido por el Jefe de Estado: la descalificación, la división. Ese no es mi camino. No me siento aludido, ni incómodo. Pero no pierdo energías en eso cuando hay cosas más importantes a la cuales dedicarse. Las primarias fueron una victoria de los venezolanos. Yo lideré el proceso y ganamos, pero generalmente ese tipo de resultados se multiplica por tres. Quienes podemos llegar a diez millones somos nosotros, no el gobierno.

-Parece muy fácil decirlo, otra cosa es la realidad.

-La víspera de las elecciones yo seguía convenciendo a la gente de que perdiera el miedo y votara. A algunos no logré persuadirlos. Me dijeron que lo harían el 7 de octubre porque "no queremos quedar anotados en una lista". Otros votaron y me pidieron que si los despedían los reenganchara. Pero este punto de partida implica una fuerza extraordinaria de cara al 7 de octubre. Ahora, tú ves al Jefe de Estado dedicado a la política y con el mismo disco rayado, en vez de ocuparse de los problemas del país.

-Sí, pero en medio de la repetición de un discurso que le ha sido útil...

-Le ha sido, en pasado...

-...en campañas electorales previas, hay elementos novedosos. Dice, por ejemplo, que lo quieres imitar en los programas sociales.

-Con nuestra gestión en Miranda le ganamos al gobierno en todas las áreas. Educación, salud, vivienda, empleo, seguridad. En Miranda hay violencia, pero mientras en el resto del país crece, en nuestro estado se mantiene líneal. No estamos satisfechos porque la idea es bajar la línea, pero lo logramos, en pequeña proporción, durante el 2009-2010. Ahora, si hay algún gobierno progresista y con profunda vocación social, ese es el de Miranda. Ahí se manifestó la lucha entre el futuro y un presente cada vez más parecido al pasado. Cuando planteé un corte en la manera de hacer política, no me refería sólo al pasado, sino al ahora. El gobierno arrancó con muchas expectativas (80% de aprobación). Hoy tiene 48%.

-La aprobación responde a logros de carácter social.

-Importantes en el 2003. Hace nueve años. En el camino tomó otro rumbo y hoy el único empleo que al Jefe de Estado le preocupa es perder es el suyo. Por eso si no te inscribes en el partido, quedas por fuera. En la campaña para las primarias dejé claro que no era un candidato de partido, ni de una alianza partidista, sino de un proyecto que iba mucho más allá, al encuentro con todo el país.

-¿Dónde quedan los partidos?

-Te lo advertí una vez: no soy candidato de Primero Justicia. Creo en los partidos porque son necesarios para la democracia, pero los trasciendo. No estoy amarrado a ninguno. El 12 lo dije: "mi partido se llama Venezuela". Y no es un discurso, sino una convicción. Aquí la lucha es entre futuro y pasado.

-Chávez la plantea en otros términos. Te acusa de estar atado a la burguesía, a los ricos, de luchar por devolverle los privilegios a quienes explotaban al pueblo.

-En la vida sólo tengo dos amos: Dios y el pueblo y estoy aquí porque el pueblo me dejó llegar. Quien no se vende no vende a los demás. No hago de mi vida personal, como Chávez, una historia que, pretende, sea la historia del país. Sí me interesa escuchar la historia de cada venezolano. La mía se la cuento a quien me pregunte. Pero la suerte del país no está atada a mi suerte. Vengo de una familia de trabajo. Lo único que hacía mi papá era trabajar para que yo estudiara, tuviera vivienda y alimentos. En mi familia nadie estuvo en política. El único político soy yo. Mi abuelo es de Coro, mi abuela de Betijoque. Los otros abuelos, polacos, llegaron al país sin nada, protagonistas de una historia increíble. De pequeño aprendí a esforzarme para conseguir las cosas. Trabajo desde los 11 años y no hago alharaca de eso. No es mi historia, sino la de los venezolanos.

-¿Por qué un niño de la clase media alta nace con esa preocupación social? ¿Ese sentimiento, no habiendo tú sufrido las consecuencias de la pobreza, de dónde proviene? ¿Es auténtico u obedece a una estrategia calculada?

-La solidaridad la tienes, aquí adentro, o no la tienes. Yo la tengo. Soy un servidor público. Es una vocación de vida. Se nace con eso. Algunos no la desarrollan. Es como los misioneros, como los médicos. Unos hacen dinero, pero hay otros cuyo objetivo no es material. No soy una persona apegada a las cosas materiales. Me tienen sin cuidado. La retribución es espiritual y soy una persona espiritual, creyente. Sí creo que la fe mueve montañas y es importante tener eso adentro.-¿Si tu familia es de origen judío, porque eres católico?

-Porque mi padre y mi madre se casaron por la Iglesia. Mi padre es católico y mi abuela trujillana, Laura, se lo inculcó. El compromiso era educarnos a los hijos en ese credo hasta que tuviéramos madurez para decidir. Y la fe la he ido desarrollando con los años. Siempre he sido católico, pero mi pasantía por la cárcel me acercó mucho más a Dios.

-¿Cómo se manifestó ese acercamiento a Dios en tu vida? ¿Ibas más a misa, eras más piadoso?

-No. Eso te hace más humano, más solidario. En Miranda tenemos un lema: hacer el bien y no mirar a quien .Este gobierno hace mucho daño porque cuando utilizas a alguien con un fin, lo estás manipulando.

-¿Dices que Chávez manipula a sus seguidores?

-Para beneficiar un proyecto personal, distinto al mío, que es un proyecto colectivo. Y allí hay una gran diferencia.

-A pesar de que te acusan de parecerte a Chávez, incluso el mismo Chavez.

-Somos dos seres humanos completamente distintos. Podemos coincidir en lo social. Pero lo mío no se queda en el discurso, sino que se manifiesta en obras. Este es el gobierno de la promesa. Mi gestión ha sido de resultados. De cambiarle la vida a la gente. Yo convierto los sueños en algo tangible.

-Tú estrategia implica no responderle a los insultos. Pero el presidente te ha dicho hasta "cochino"....

-Ja...ja....ja ... yo me baño.

-Pero dijo algo cierto. En algún momento tendrás que enfrentarlo y sería posible hasta un debate.

-Es que vamos a contrastar. El gobierno plantea un camino que es el socialismo. Yo planteo el progreso.

-Chávez dice que hablas de "progreso" porque le temes al término "socialismo".

-Este gobierno no es socialista. Utiliza el término "socialismo" para transmitir una imagen de identificación con los pobres, pero hay en él conductas absolutamente fascistas. Puede ser de izquierda, pero de izquierda retrógrada, de atraso, de confiscaciones, de un Estado todopoderoso. Yo planteo un camino de progreso en el cual el Estado es un orientador, un promotor donde la iniciativa privada tiene su espacio y está llamada a contribuir al progreso. Un país moderno, con generación de empleo. En los meses por venir los contrastes van a quedar clarísimos. Habrá confrontación de ideas, visiones. Ellos miran hacia el pasado, nosotros hacia el futuro.

-¿Cómo se manifiestan esas diferencias?

-Esta es una carrera donde hay un corredor cansado y uno con energía. El cansado está tratando de ver cómo llega a la meta. Así sea poniendo una zancadilla, lanzando cualquier cosa para que uno se caiga. Este es un corredor vigoroso, que recorre el país de punta a punta, para presentar una propuesta que saque al país del estancamiento. Hay 18 años de diferencia entre los dos. Toda una generación. Así que le llegó el momento de dar el paso. Los insultos y descalificaciones son el recurso típico del boxeador agotado, grandote, peso pesado, que está viendo a ver de donde saca un golpe, como sea, para tumbar a un contrario más delgado, ágil y enérgico. Es David contra Goliat.

-¿Alí (Cassius Clay) contra George Foreman?

-Si quieres ponlo así. Pero, ¿quién ganó? No le tengo ningún temor a mi competidor. Ninguno. No me intimidan las amenazas. Sí me quita el sueño la integración y el encuentro de los venezolanos. No quiero encontrarme con esposos que no se hablan o hijos separados de su familia por la política. Todo por un discurso agresivo, causa de una violencia que no han podido reducir.

-Según Chávez él es garantía de paz y tú la causa de un " incendio nacional".

-¿Cómo puede decir un gobierno que es garantía de paz cuando el año pasado hubo cinco mil protestas que ahora intentan tapar los medios oficialistas? Entonces, no hay estabilidad y eso sólo lo puede lograr un gobierno de progreso.

-Según el escritor mexicano Jorge Volpi América Latina es el territorio de la "democracia imaginaria" porque nunca se hace realidad. ¿Cómo piensas torcer ese fatalismo?

-Los venezolanos sentirán un cambio a corto plazo como lo sintieron los mirandinos. Al principio el gobierno central generó todos los obstáculos. Nos quitaron hospitales, ambulatorios, carreteras. Pero los fuimos superando porque cuando un pueblo se decide a cambiar no hay obstáculo que lo detenga y el país está listo para el cambio. Como gobernador he demostrado que se puede gobernar para todos los colores y eso garantiza la estabilidad. Todo el mundo está a la espera del 7 de octubre y hay una suerte de estabilidad porque vienen las elecciones. La apuesta es avanzar en democracia. Chávez debe haber celebrado el 4F con el dolor de su alma porque no llegó al poder por el golpe. Celebró un fracaso, al final llegó por votos y se va por votos.

-Tú puedes ganar, ¿pero Chávez entrega?

-Que nadie tenga la menor duda de que quien pierde las elecciones entrega.

-El jueves lo prometió.

-Eso no depende de él. Deseos no empreñan. El gobierno de hoy se parece a la oposición de hace diez años. Es errático. Hoy nuestra agenda no depende del Jefe de Estado. Tenemos nuestras propias propuestas, tenemos experiencia y estamos haciendo las cosas bien.

-Más allá de los precandidatos, ¿cómo ha sido la reacción de la dirigencia de oposición que no te apoyó?

-Ha sido un proceso natural, nada forzado. Estuve reunido con Ramón Guillermo (Aveledo) para la articulación del comando de campaña. Hemos hablado con los partidos tradicionales. Viajé al Zulia para la reanimación de la candidatura de Pablo (Pérez).

-Ese apoyo natural, ¿no obedece a la magnitud del triunfo?

-Sí. Hay un liderazgo y una realidad política distinta. Tengo un mandato y no le voy a fallar a la gente.

-Es obvio que te has preparado a lo largo del tiempo para lograr un objetivo. Pero a veces, cuando logras avanzar hasta donde has llegado y se presenta el momento decisivo del remate, sobre todo en un país como éste, ¿no sientes un temblorcito?

-No, porque nos metimos en esto no sólo para ganar sino para gobernar. Estamos preparados desde todo punto de vista. El mandato que me dieron las primarias me dio la fuerza para lo que viene ahora. En los últimos quince días me dediqué, sobre todo, a promover la participación porque sabía de su importancia.

Fuente:http://www.eluniversal.com/nacional-y-politica/120219/el-insulto-es-el-recurso-de-un-boxeador-agotado-grandote-y-pesado

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Capriles es el hombre mas preparado que tenemos en el país para ser el próximo presidente, he observado su trayectoria a lo largo de los años y no me cabe la menor duda de que el lo puede lograr. Lo que Capriles se propone, Capriles lo logra!

yeralin dijo...

hola caprile como esta tu familia que dios te bendiga a ti tu familia
soy de maracay aragua mi hermana quiere conocerte si quiero conocerla a ella tiene que vijar alemania ella se llama carmen cecilia viajar para a alemania dia 23 martes de octubre