POR:FÉLIX VELÁSQUEZ.
En Venezuela hemos perdido la capacidad de asombro con todo lo sucedido en las últimas semanas por aire, mar y tierra. Primero los aviones sufren fallas y ponen en peligro la vida de miles de venezolanos sin que exista la responsabilidad del Estado para garantizarle la vida a los usuarios y la de evaluar la falta de dólares para que estas aeronaves estén perfecto estado a la hora de despegar de los aeropuertos.
Seguido de esto está la expropiación arbitraria de conferry la línea de transporte marítimo que por años surco los mares orientales. En manos del Gobierno se le ve un futuro incierto a esa empresa y lo más esperado es un caos en el funcionamiento de dicho servicio, ya que todo lo que toca el régimen lo destruye y eso lo vimos con todas las empresas básicas que ahora están en el suelo.
En este mismo sentido podemos señalar que el accidente ocurrido en el tren de Charallave no tendrá responsables, lo más seguro es que se lo achaquen a un sabotaje de la oposición en vez de revisar minuciosamente cuales fueron las fallas y corregirlas ante el país. El gobierno ha destruido el Metro la gran solución para Caracas y obra magistral de la Cuarta República como dañaron los trenes en el aparatoso choque del pasado jueves.
El pueblo venezolano se ha acostumbrado al caos, al incendio en los aeropuertos, a la inseguridad, a la mentira de la salud del presidente, no hemos vuelto unos indolente, estamos en la hora del sálvese quien pueda, de mantenernos en la pobreza y el culto a la miseria como opción de vida.
Este tipo de mentalidad debe acabar en Venezuela, basta de tantas mentiras, de patrañas, de bajeza política, es el momento de cambiarle el rostro al país, demostrando que si podemos ser una potencia mundial gracias a nuestro petróleo y a nuestras riquezas, que podemos tener complejos habitacionales como en Europa que, que podemos tener Universidades del primer mundo, que podemos formar profesionales que compitan con la países mas avanzados.
Es decir Venezuela puede tener progreso social, si y solo si, cambia su mentalidad de bodeguero por la mentalidad del empresario, basta ya del chantaje de la pobreza y del caos es hora de vender una esperanza y un futuro en donde nos podamos encontrar con la evolución económica y el desarrollo en todos los sentidos apostando a un cambio de paradigma y un cambio en las riendas del país.
Los que nos gobiernas demostraron ser los artificies del caos en todas sus expresiones y lo único que consiguieron fue la destrucción de la nación, con su visión balsera de la política, yo apuesto a seguir a quienes llevaron al hombre a la luna y no a los balseros.
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