POR:FRANCISCO PEREGIL.
Los sondeos a pie de urna le otorgan una mayoría con la que no precisa concurrir a una segunda vuelta.
"Esta revolución no la para nada ni nadie", celebra el mandatario desde el balcón del palacio presidencial.
"Esta revolución no la para nada ni nadie", celebra el mandatario desde el balcón del palacio presidencial.
Las encuestas no se equivocaron. Rafael Correa, el profesor
universitario de economía que llegó al poder en Ecuador en 2007 hablando
de “revolución ciudadana”, fue elegido presidente con una mayoría lo
suficientemente holgada como para no tener que concurrir a una segunda
vuelta. Correa sólo necesitaba el 51% de los votos y consiguió alrededor
del 60%, según los sondeos a pie de urna de tres encuestadoras, diez
puntos más que los que él obtuvo en las presidenciales de 2009. El
segundo de los ocho candidatos que optaron a la presidencia, el banquero
del Opus Dei Guillermo Lasso, se quedó a una distancia aproximada del
20%. Ataviado con una de sus clásicas camisetas blancas bordadas en una
comunidad indígena del país, Correa compareció en un balcón del palacio
gubernamental de Carondelet ante miles de simpatizantes y proclamó:
“Esta revolución no la para nada ni nadie, compañeros”.
La prosperidad que Correa insufló al país en seis años salta a la
vista. En Quito, por ejemplo, un aeropuerto internacional se inaugurará
el próximo miércoles. Así sucedió también con los miles de kilómetros de
carreteras construidos o reparados, con decenas de puentes, escuelas,
hospitales… Pero ese auge económico se ha visto lastrado por grandes
problemas que el autoproclamado presidente revolucionario tendrá que
afrontar en los próximos cuatro años.
Lo que más preocupa ahora mismo a la población es el aumento de la
delincuencia, según Ángel Polibio, director de la encuestadora Cedatos.
“Después, la gente aspira a no perder su empleo, a tener suficientes
recursos para enfrentar el día a día. Y en tercer lugar, preocupa la
corrupción, tanto pública como privada. La gente reconoce un gran
trabajo en asistencia social hacia los más desfavorecidos, de
inversiones en carreteras, salud y vivienda, pero dicen que tiene que
ampliarse”.
Puede resultar paradójico que la inseguridad haya aumentado al mismo
tiempo que disminuía la pobreza en un 27% desde 2006. Pero lo cierto es
que los ecuatorianos se han tenido que acostumbrar a crímenes hasta hace
poco muy esporádicos como el secuestro exprés. “Influyó mucho el hecho
de que el país adoptara el dólar como moneda oficial en el año 2000”,
explica el politólogo español Decio Machado, quien fue asesor de Correa
en los tres primeros años de su mandato. “El dólar facilita el lavado de
dinero para las grandes redes de narcotráfico. El país se convirtió en
una gran puerta de salida para la droga que llega desde Colombia y Perú.
Y la policía está infiltrada por narcos”.
En cuanto a la corrupción, el economista Pablo Dávalos, profesor de
la Universidad Católica de Quito, cree que las enormes sumas de dinero
que ha manejado el Gobierno gracias a los altos precios del petróleo
ayudaron a que el anterior Ejecutivo —“no Correa ni alguno de sus
ministros, pero sí el Gobierno”— se convirtiera en el “más corrupto de
la historia reciente del país”.
“Correa cometió el error de proteger a muchos de quienes se vieron
envueltos en casos de corrupción”, indica Dávalos. “Hasta la llegada de
Correa, el juego político consistía en que la oposición denunciaba
corruptelas y el Gobierno le iba cediendo espacios de poder al resto de
partidos. Pero ese juego se terminó con Correa. Ante críticas
absolutamente documentadas de corrupción, el presidente optó por
proteger su poder y hegemonía. No permitió el más mínimo ejercicio de
fiscalización. Así que muchos personajes utilizaron esa protección en
beneficio propio. Se creó una idea de que era posible enriquecerse”.
Otra de las asignaturas pendientes del nuevo Gobierno y la nueva
Asamblea será el respeto hacia las libertades. Durante el mandato de
Correa aumentó la presión del Gobierno contra la prensa crítica. El
último incidente se produjo a finales de enero, en plena campaña
electoral. Bonil, el caricaturista del diario El Universo,
publicó una viñeta en la que cuestionaba que la rebelión de un grupo de
policías en Quito el 30 de septiembre de 2010 fuese un golpe de Estado
tal como lo calificó Correa. Tanto Correa como su candidato a la
vicepresidencia, Jorge Glas, enviaron una carta a El Universo
en la que, amparándose en el derecho a réplica, solicitaban que se les
publicara en el espacio dedicado a las caricaturas un texto en el que El Universo
debía solicitar disculpas públicas por la viñeta. Y el 28 de enero de
2013, el diario publicó la carta íntegra de Correa y Glas, con sus 897
palabras, en lugar de la caricatura.
“Una se piensa mil veces cada palabra que va a escribir, porque o
bien te puede caer una denuncia millonaria por parte del presidente o
bien te ridiculiza y saca tu foto en sus discursos televisados ”, señala
una periodista del diario El Comercio.
Otra de las asignaturas pendientes será la salud. “El Gobierno ha
invertido en buenos hospitales dotados con magníficos equipos. Pero
faltan especialistas. Está ofreciendo incentivos para los profesionales
que se fueron hace años”, indica un empresario español. En educación
también se hizo un esfuerzo en mejorar la calidad de la primaria y
secundaria, pero aún queda mucho por hacer, según explica el poeta y
profesor universitario Iván Carvajal. “Las diferencias entre la calidad
de una escuela en una zona rural y en las ciudades son tremendas. Y en
ciencia y tecnología, por ejemplo, no ha habido ninguna inversión”,
señala.
“Una verdadera transformación en la economía del país”, eso es lo que
muchos economistas reclaman al próximo Gobierno. Medidas profundas que
alejen al país de su dependencia del petróleo. Correa cuenta con mucho
tiempo para ello. Cuando concluya su mandato, en 2017, habrá permanecido
diez años en el poder. En principio no necesita más tiempo. Correa ha
prometido que se marchará a casa ese año.
Fuente: http://internacional.elpais.com/internacional/2013/02/18/actualidad/1361142647_152971.html
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