POR: ALEXANDER CAMBERO.
Ante el más grotesco de los ventajismos electorales, surge un pueblo que tiene motivos suficientes para pensar en nuevos episodios que nos conduzcan hasta el regazo de la esperanza. Más de cinco millones de venezolanos no se dejaron triturar por el espejismo de un gobierno mediocre.
Una feroz ofensiva que combinó cuantiosos recursos, medios dóciles al servicio de su majestad; todo el aparato del Estado convertido en un perverso mecanismo de amedrentamiento. Millones de dólares para comprar conciencias y someter rebeldías, partidos políticos que funcionan como títeres que se mueven con los alambres embrionales que sacian su voraz apetito burocrático. Sin embargo, no pudieron destruir el espíritu democrático de vastos sectores nacionales, que no se arrodillaron ante el terror.
Fue indignante ver cómo los recursos de todos los venezolanos se utilizaron para imponer la máscara de una dictadura, que simula muy bien sus siniestros propósitos. Todos los organismos del Estado alineados exclusivamente para complacer el deseo patológico del sátrapa de Miraflores.
En esta jornada histórica surgió una nueva generación de líderes venezolanos que lo dieron todo por brindarle un nuevo rostro a la libertad. Estudiantes que cruzaron como saeta todos los rincones de nuestra geografía, con su rostro al viento y las manos pintadas con la fuerza de la dignidad.
Hoy transgrediendo la historia bíblica, Goliat venció a David. El gigante filisteo pudo más que el arrojo e ímpetu del niño héroe. El poder del Estado pudo más comprando conciencias y manipulando, que aquel imberbe luchador que sólo presentó como artillería las armas de su conciencia.
Un Estado fusionado en el alma de un hombre. La revolución bolivariana envejece en la procacidad de Hugo Chávez. El odio elevado al atrio de la venganza; suenan hondas tempestades de persecución. Un solo personaje que gobierna desde Miraflores, controlando todo el tejido del gobierno. A veces es gobernador, alcalde, nadie puede tener una idea propia. Asumir la autonomía de pensamiento es contrarrevolucionario.
La esperanza venezolana está viva. Respira profundo y se pone en pie. Más de cinco millones de capacidades que no vendieron su destino. Optaron por enfrentar cruentos combates, pero no bajaron su rostro sereno. Vienen nuevas batallas, el régimen envalentonado vendrá con toda su saña a tratar de liquidar al otro país que no se dejará pulverizar por la barbarie.
En las horas más dramáticas de la patria es necesario mantener la lucha a todo trance, se nos avecinan tiempos difíciles. Las dictaduras tienen el encanto enceguecedor de la dádiva. La conciencia frágil de muchos se pierde tras el plato de lentejas.
En la oscuridad del momento aciago, llega el momento de la dignidad. Tenemos una juventud profunda que rebosa optimismo. Ella significa la razón de los años por venir.Toda la maquinaria del Estado celebra su éxito. Una cofradía que se regocija de los recursos del gobierno más corrupto del hemisferio. Disfrutan de las carantoñas del poder. Suenan vítores y avanzan las caravanas, las banderas ondean refrendando el atajo de la dictadura.Existe un pueblo vivo. La patria tiene el optimismo del futuro esplendoroso. Frente al arsenal obsceno que compra el alma de los incautos, nace una generación para escribir una nueva historia. Aquí vive otra nación que no cree en las ideas que pregona el huésped miraflorino.
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El No obtuvo 861.440 votos en los 5 municipios de la capital, 139.000 sufragios más que
los alcanzados por Antonio Ledezma en noviembre
Caracas se ratifica opositora
Hubo una participación de 70%, de acuerdo con el segundo boletín del CNELa tendencia se repite con respecto a los últimos procesos electorales: el voto de la oposición es duro en las zonas de alta población, en particular en las capitales de estado.
Además de la victoria en Caracas, el No se impuso en 7 ciudades capitales: Valencia, Coro, Los Teques, La Asunción, San Cristóbal, Maracaibo y Mérida. En el caso de Carabobo, se perdió en la entidad, pero ganó en su urbe más habitada (a la inversa de las regionales). En total, la oposición subió su respaldo en 16 de las 23 capitales.
En Caracas, la oposición ganó e incrementó su caudal en los 5 municipios en relación con el 23-N. Sólo se cedió en Libertador, pero la ventaja chavista se redujo a la mitad (de 74.000 votos a 38.000 votos). En términos porcentuales, la votación del No fue casi 20% mayor en Caracas, siempre con respecto al 23-N, en un escenario similar de participación electoral.
En ciudades como Barcelona, Barquisimeto, Maracay y Yaracuy el resultado electoral fue muy parejo: el Sí apenas superó al No por distancias no mayores de 3 puntos. En la capital anzoatiguense hubo casi un empate técnico: 50,02% a 49,9%. En otras ciudades, como Guanare, Tucupita, y en regiones como Vargas zonas de tradición chavista el incremento opositor osciló entre 5 y 10 puntos porcentuales.
El politólogo Herber Koeneke aseveró que los resultados electorales de los últimos procesos afirman la pérdida de votos del presidente Chávez en zonas consideradas como rojas, rojitas: “El chavismo no tuvo el número de votos que esperaba. Mientras que la oposición aumentó su ultima votación. La oposición rescató zonas populares y Chávez tuvo una pérdida real en ellas.
El hecho de que la oposición haya ganado en Sucre lo demuestra otra vez: hay un desgaste claro en los seguidores del Presidente”.
Un caso muy particular es San Cristóbal, en el que el No obtuvo su respaldo mayor con 68,41%, casi 20 puntos más que en las regionales. Mérida también llama la atención, de ser derrotada la oposición en noviembre subió dos meses después hasta 64,11% de los sufragios.
El chavismo ganó en noviembre la Alcaldía de Barquisimeto con 55,36% de los votos, dos meses después perdió 3,98% de los votos.
Koeneke cree que los resultados del referéndum revelaron una oposición que está en progreso y un gobierno que se mantiene por la capacidad de empatía que maneja el Presidente con los electores. “Si el referéndum se hubiese convocado a finales de año, Chávez habría perdido en muchos sectores populares”, agregó El politólogo pronosticó para las elecciones parlamentarias y municipales una sorpresa electoral.
• Segundo boletín.
A menos de 24 horas de haber anunciado los primeros resultados, el Consejo Nacional Electoral presentó el segundo boletín con 99,57% de las actas transmitidas. Esto contrasta con lo sucedido el pasado 2 de diciembre, cuando el organismo comicial se negó a dar resultados definitivos.
La opción del Sí alcanzó 6.310.482 votos (54,85%) y la del No, 5.193.839 sufragios (45,14%). Es decir, la diferencia entre los votos del chavismo y la oposición es de 1.116.643 sufragios.
El segundo reporte señaló un total de 11.710.740 votos escrutados. Sólo faltan por contabilizar 409 actas. La cantidad de votos válidos fue de 11.501.321 y 206.419 los nulos. La abstención relativa, según actas transmitidas, es de 29,67%, lo que indica un poco más de 70% de participación.
Por CARLA NAVARRO
canavarro@el-nacional.com
El Nacional
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