jueves, abril 10, 2014

"La emboscada del diálogo"

 
 
POR:THAYS PEÑALVER.

Dejémonos de idioteces. Sabemos perfectamente que el diálogo parte de los amigotes de Castro, Hussein, Gadafi, Al Asad, Kim-il y compañía.  Que parte de personas sancionadas internacionalmente (lista OFAC) por apoyar el narcotráfico, al terrorismo internacional islámico y con personas que idearon mecanismos para burlar las sanciones a Irán. Vamos a dialogar con una veintena de "nuevos zares" mil millonarios que ahora tienen el control de Venezuela y sus recursos, con cientos que viven una vida de lujos sin parangón y con las mafias protegidas. Así que sabemos que están dispuestos a todo por conservar el botín.

También por la minoría suicida salvajemente atrasada que piensa que la Revolución no se negocia y también con los más peligrosos: la jauría homicida. Los que no ha tenido contemplación alguna en crear una estructura parajudicial, parapolicial y paramilitar para protegerse, destruyendo la vida de miles de sus compatriotas. Con aquellos que se saben enjuiciados tanto por tribunales locales, como por internacionales, desde el que entró a las tierras sudadas por otros con cinismo y violencia para arrebatárselas, o a las empresas, hasta los que dirigen a los "tonton macoutes" (hombres del saco de Haití) y a los interahamwes (los que pelean juntos de Ruanda) criollos, porque saben perfectamente que al dictador que un día fue endiosado en Haití, terminaron por sacar sus huesos de la tumba y apalearlos (Duvalier) y los 95 que crearon en Ruanda a los "colectivos armados" fueron arrojados para siempre en las mazmorras. En fin, que sabemos, pues, la estatura de los personajes con los que se pretende dialogar, la altura del diálogo posible, y mas aún conocemos sus posibilidades de éxito.

Pero, ¡cuidado!, pongamos las cosas en orden. Una cosa es saber todo eso y una muy distinta negarnos internacionalmente al diálogo, porque en este momento el diálogo es una papa caliente internacional que está en nuestras manos. Así que ordenemos un poco nuestros pensamientos. Este es el primer diálogo internacional de Venezuela, de allí su principal atractivo. Es un diálogo monitoreado por la ONU y por el pleno de la Unión Europea, con cancilleres buenos y malos según se mire, pero a la vista del planeta, y esos cancilleres serán los responsables internacionales del éxito y del fracaso, así que ya no podrán responder sólo a sus intereses.

Lo segundo, es que los que quieren diálogo y no resistencia en la calle, deben entender que el diálogo (internacional) llegó a ser posible gracias a la crisis generada en esa calle. Que fue esa resistencia la que mostró al planeta la verdadera cara de la Revolución. Así que maldecir esa resistencia, que fue la que obligó al diálogo internacional es por mucho, una auténtica idiotez. Pero la resistencia ciega también es una idiotez, porque en el terreno de la diplomacia no solo se ganan grandes batallas, sino lo más preciado, la legitimidad. Por eso el Vietcong jamás estuvo negado al diálogo de paz y la guerrilla colombiana ha estado sentada con el gobierno varias veces sin que ello desmeritara posición alguna de las partes.

Hoy el planeta civilizado está de nuestro lado. Pero el gobierno débil como nunca, con toda su malicia nos ha emboscado con el diálogo. Se han presentado ante ellos como una hermanita de la caridad, cuando lo que pretende precisamente es que nos neguemos a ese diálogo internacional. Ahora bien, es perfectamente lógico que muchos piensen que les están robando su lucha de resistencia sentándose a dialogar y también es perfectamente válido el pensamiento que suscribo plenamente de María Corina, sobre que el diálogo no puede ser para "darle estabilidad a la dictadura" sino para "transitar hacia la democracia".

Pero precisamente por eso las FARC le pidieron al gobierno de Santos 99 condiciones. Y en nuestras condiciones para el diálogo está nuestra legitimidad democrática y el apoyo internacional a nuestra causa. Unas condiciones previas legítimas pueden revertir la emboscada y ser en sí mismas la respuesta a la inquietud de María Corina. Si no se cumplen, el planeta entero (menos los sospechosos habituales) apoyarán nuestra lucha.

Ahora contemos nuestras bendiciones. En la última "batalla electoral presidencial" dejamos claro nuestro poderío, ganamos la "batalla de la calle" y en la "batalla de la Resistencia" estamos logrando el apoyo del planeta democrático. Ahora, si rehuimos la "batalla diplomática" lo perderemos todo. Entonces no se trata de cambiar de batalla, sino de que simplemente nos abrieron otro frente en la misma batalla y debemos pelearlo con la misma intensidad de las barricadas. Nuestro único enemigo es la representatividad de los dialogantes. En esa mesa no pueden haber "representantes de nadie" o las "nulidades engreídas" de siempre y mucho menos las sillas vacías de quienes han conquistado este presente.

Como dirían los españoles, sabemos que dialogaremos con macarras y que la batalla a nivel nacional ni siquiera tiene sentido, pero los podemos terminar de aplastar a nivel internacional.

tpenalver@me.com

@thayspenalver

Fuente: http://www.eluniversal.com/opinion/140410/la-emboscada-del-dialogo

2 comentarios:

Anónimo dijo...

El ocaso de la democracia

POR: TRINO MÁRQUEZ.

A partir del 2 de febrero de 1999, cuando Hugo Chávez asume la Presidencia de la República, comienza un progresivo proceso de destrucción de la democracia. El plan tenía como objetivo clave triturar las instituciones autónomas que garantizan la alternabilidad en el poder de las fuerzas que se mueven en el escenario político. Al comienzo, Chávez habla de gobernar hasta 2021. Luego amplia el horizonte hasta 2030. Más tarde dice que mandaría hasta que cumpliese 80 años. La Divina Providencia se interpone en sus aspiraciones, pero el caudillo deja inoculado en sus herederos el virus autocrático. Honrar su memoria implica continuar la labor que él inicia: es preciso acabar hasta con el último rastro de cualquier institución que supervise y propicie la renovación en los mandos. Esta es la gran tarea que el maestro les fija. La meta: lograr la plena fusión entre el Gobierno, el Estado y el PSUV. Que la trinidad sea perfecta, tal como ocurría en las autocracias comunistas del pasado.

opinan los foristas

Para entender lo que ocurre en Venezuela no hay que ensanchar el concepto de democracia, sino modificar la definición de dictadura. A pesar de su parecido con la Cuba de los hermanos Castro, estamos en presencia de un régimen comunista posterior a la caída del Muro de Berlín y al colapso del Imperio Soviético, incluido el derrumbe de los países satélites de Europa oriental.

Las características básicas de esos sistemas pueden resumirse del siguiente modo. Presencia de un fuerte componente represivo: nadie, por más encumbrado que sea, está a salvo de ser espiado, encarcelado y torturado; los sofisticados aparatos de seguridad supervisan a los ciudadanos que potencialmente representan un peligro para el Estado. Desprecio olímpico por los derechos humanos. Control total de las instituciones públicas a partir de la fusión entre el Gobierno, el Partido Comunista y el Estado. Las decisiones fundamentales se adoptan en el Comité Central del Partido, de donde emanan las instrucciones para los organismos públicos; esas órdenes son de estricto cumplimiento para todos los funcionarios. Ausencia de medios de información y comunicación independientes y hegemonía comunicacional, con el fin de divulgar e imponer la verdad oficial y uniformar el pensamiento de todos los ciudadanos. Subordinación de la Fuerza Armada a los dictámenes del Partido Comunista; los militares son fichas de la organización política. Intervención y control de la economía a través de la supresión de la propiedad privada, la estatización de los principales medios de producción, la colectivización del sector agrícola y la pequeña y mediana industria. Regulaciones y controles de todo tipo. Asfixia o desaparición de las organizaciones independientes de la sociedad civil: partidos, sindicatos, gremios, federaciones estudiantiles.

Aunque no tan exacerbados como en los antiguos países comunistas, todos esos rasgos se encuentran en Venezuela desde 1999, solo que la enorme resistencia desplegada por las fuerzas democráticas ha preservado importantes espacios donde existen la libertad y la independencia. Siguen operando algunos medios de información y comunicación independientes, y partidos políticos ajenos al Estado. El segmento ocupado por la propiedad privada continúa siendo significativo. Existen organizaciones no gubernamentales que defienden los derechos humanos.

En el plano político e institucional, sin embargo, no hay duda de que la democracia se degradó, y que avanzamos aceleradamente por el camino de la dictadura abierta y desembozada. El hecho de que en Venezuela se vote para elegir las autoridades públicas no modifica esta tendencia, únicamente la encubre. Las nuevas dictaduras, las del siglo XXI, necesitan del sufragio popular. Prefieren ser electas, antes que imponerse mediante el puro uso de la fuerza bruta.

Anónimo dijo...

El ocaso de la democracia

POR: TRINO MÁRQUEZ.

El Gobierno convirtió el sufragio popular en una cortina de humo para ocultar los atropellos que comete con el fin de perpetuarse en el poder. Esos desafueros lesionan incluso la institución del voto. Las decisiones que el TSJ adoptó contra los alcaldes Daniel Ceballos y Enzo Scarano, y contra María Corina Machado -la diputada electa en 2010 con la mayor cantidad de votos- cachetea la voluntad de los electores que sufragaron por esos representantes populares. La FAN es un apéndice del PSUV. La violación de los derechos humanos y el silencio cómplice de la Fiscalía y la Defensoría revelan el rostro más agresivo de la neodictadura.

@trinomarquezc