Hugo Chávez, el mayor gastador y especulador de dólares. (Venga a mi que tengo dólares)

POR: ARCANGEL VULCANO.

Hay que ver que Hugo Chávez Frías y sus obsecuentes Ministros, si es verdad que son los más grandes cínicos, caraduras, mentirosos y desvergonzados que hayamos conocido más recientemente los venezolanos. El desfasado caudillo populista, demagógicamente ahora pretende convencernos que en Venezuela no se ha producido una abrupta devaluación de la moneda, sino que sólo se ha tratado de un necesario ajuste cambiario dizque para “repotenciar y fortalecer la economía nacional y auspiciar la producción nacional” ¡qué riñones!

El gobierno seudo revolucionario del Sr Hugo Chávez Frías ha recibido, manejado, controlado y gastado por concepto de renta petrolera en los últimos once años, más de 950.00 millones de dólares. Hoy en día podría decirse, que se ha convertido en el mayor gastador y especulador de dólares desde su Palacio de Miraflores, ahora vive amenazándonos repitiéndonos la frase: "Venga a mi que tengo Flores", cada vez que se le ocurre una nueva expropiación, cuando en realidad, debería decir, "Venga a mi que tengo dólares", con los nuestros ¡claro está!los del pueblo venezolano que sufre su oprobioso régimen conculcador de sus derechos. El mayor gastador y especulador que hoy es Chávez, es el mismo que nos limita y reduce a los venezolanos cuando le da la gana las necesarias divisas para ejercer nuestros derechos a circular y viajar libremente, impidiéndonos disponer a discreción de nuestro peculio; el mismo que nos raciona la luz y el agua; pero que regala a manos llenas y sin controles a sus socios ideológicos en el mundo, el dinero que aquí deja de invertir en obras prioritarias; ahora pretende hacernos creer en vano, que podrá controlar la inflación persiguiendo y coaccionando a sus conciudadanos comerciantes nacionales, obligándolos a vender sus existencias y mercancías compradas con dólares al cambio de 2,15 por dólar, para que después intenten reponer sus inventarios pagándolos con un dólar a 4,30, so pena de cerrar y expropiarles sus negocios.

Ahora los comerciantes y empresarios venezolanos son perseguidos por el especulador mayor, el acaparador de los dólares, y pretende en vano culparlos de especuladores, porque lógicamente se han visto obligados a hacer las debidas previsiones para poder en el futuro reponer sus inventarios sin sufrir pérdidas.Ahora el Sr Chávez gastador y especulador de dólares cierra negocios de quienes se atreven a remarcas los precios.

El especulador de dólares Hugo Chávez, después que ha nacionalizado y expropiado importantes empresas, para prácticamente paralizarlas manteniéndolas hoy día al borde del colapso, de la quiebra y de la crisis laboral, como por ejemplo en el caso de las empresas de Guayana; luego de destruir el aparato productivo nacional, persiguiendo a los empresarios, aplicando a discreción medidas confiscatorias y expropiatorias, así como recetas colectivistas, a través de la ejecución de unas políticas de estado totalitarias y militarista, ignorando el estado de derecho, irrespetando el sistema de libertades económicas, desconociendo los derechos de propiedad privada, imponiéndonos un régimen económico de corte castro comunista, intervencionista, mediante la imposición de más impuestos, controles, restricciones, ejerciendo de hecho el estrangulamiento de la iniciativa privada, violando flagrantemente la Constitución y las leyes de la República, y con ellas nuestros legítimos derechos.Los venezolanos sabemos que Hugo Chávez amaneció más rico, poderoso, especulador, arbitrario y abusivo; pero nosotros más pobres, porque ahora él y su corte de boliburgueses aduladores, tendrán para su beneficio las arcas fiscales del estado, repletas de dólares a 4,30, por lo que dispondrán de más bolívares para gastarlos en campañas político electorales en Venezuela y en otros países; así como también, el especulador Chávez, dispondrá de siete mil millones de dólares sustraídos de las reservas internacionales, las cuales podrá usar discrecionalmente a capricho, sin controles y sin ni rendirle cuentas a nadie, para ventajosamente invertirlas como le de la gana en su proyecto político personal, con el aval del resto de los poderes públicos del estado, servilmente sumisos a los requerimientos de su Jefe Supremo.

Afortunadamente los venezolanos tendremos en nuestras manos muy pronto la oportunidad de cambiar y revertir esta injusta situación, cuando concurramos masivamente a votar para elegir a la nueva Asamblea Nacional, desde ese día podremos comenzar a poner en su sitio al especulador mayor, y a sus falaces, adulantes Ministros y a sus cómplices complacientes poderes públicos del estado.