POR:PILAR DÍAZ.
Cuatro reveses en menos de un mes
Para Cardozo no es casual el impasse sino que es el resultado de una política exterior
La retirada del presidente Hugo Chávez como mediador en el canje humanitario entre el gobierno de Álvaro Uribe y la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia es vista como la cuarta derrota diplomática sufrida en menos de un mes por el mandatario venezolano, alertaron analistas.
Para Luis De Lion, analista internacional con residencia en París, la situación que se vivió en Chile fue algo premeditada. "Comparto la tesis de la historiadora Elizabeth Burgos, que conoce muy bien el tema cubano. La situación que se vio en Santiago de Chile fue preparada y trabajada por Chávez y Fidel Castro de manera de cazar una pelea diplomática con España y de ahí intervenir de alguna manera en la política interior española", dice.
Según De Lion, no escapa el discurso recurrente de la propaganda chavista y castrista sobre los 500 años de sometimiento a España.
Al igual, el presidente Chávez obtiene una derrota más en la Cumbre de la OPEP, pero que es opacada por el precio del petróleo, asegura. "No es nuevo el intento del mandatario de querer darle un sentido político al cartel petrolero, pero que tiene un fuerte opositor en Arabia Saudí, alerta De Lion.
El tercer traspiés que da el mandatario venezolano en este mes es en París el pasado martes, al presentarse en la reunión con Nicolas Sarkozy sin las pruebas de vida de los rehenes que tiene las FARC
"Siendo una democracia seria con un presidente serio y el país en donde se inventó el protocolo y la formalidad, llegar con las manos vacías fue muy mal visto. De hecho los medios editorializaron de manera agria y fuerte contra el presidente Chávez y fue evidente el malestar, pues el presidente francés no participó en la rueda de prensa que dio al final el mandatario venezolano y quien lo acompañó fue el vocero del presidente Sarkozy y tampoco habló; estuvo al lado del mandatario venezolano como una cortesía al invitado", explica De Lion.
A su vez, para la internacionalista Elsa Cardozo, la salida de Chávez como mediador en el canje colombiano "es un trago bien amargo. Uno más".
Advierte que no es casualidad, sino el "resultado del contenido de la política exterior del gobierno de Chávez que es irritante, estridente, confrontador y que no respeta acuerdos y convenios".
La internacionalista asegura que con esta situación "se puede decir que el Gobierno está quedando al desnudo en cuanto al proyecto de Chávez, que no se amarra a instituciones y compromisos. Ni siquiera al principio de no intervención".
Para Cardozo también quedó en evidencia que el presidente venezolano no tiene el peso que se suponía que tenía ante las FARC, al no recibir la fe de vida de los rehenes. Incluso en algunas ocasiones Chávez reconoció que era más complicado de lo que parecía.
"Sencillamente demostró que no tiene acceso a los integrantes de las FARC y esto también debilita su gestión como mediador", insiste Cardozo.
Por último, los analistas insistieron en que la mayor responsabilidad sobre el futuro de los rehenes la tiene la guerrilla, que se ha negado a agilizar el proceso de negociación.
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Fuente:www.eluniversal.com
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