jueves, octubre 25, 2007

"CHÁVEZ Y EVO ENTRAN EN DEBATE POLÍTICO ARGENTINO"



POR: OSCAR SERRAT.


AP/Aunque coinciden en que la Argentina debe dar prioridad a América Latina en su política exterior, los tres principales candidatos para las elecciones presidenciales del domingo discrepan sobre qué relaciones mantener con el presidente Hugo Chávez y sobre el papel de Venezuela dentro del Mercosur.

Hay también diferentes enfoques sobre el presidente boliviano Evo Morales, a quien la candidata oficialista Cristina Fernández, ha manifestado simpatías. Los candidatos opositores Elisa Carrió y Roberto Lavagna, más cautos respecto del mandatario boliviano, ocupan el segundo y tercer puestos en intenciones de votos, según las encuestas.

Un tercer tema de discrepancia es cómo salir del atolladero diplomático con Uruguay, por la instalación de una planta de celulosa sobre un río fronterizo, que el gobierno argentino teme que contamine el medio ambiente, lo que rechaza Montevideo.

Los temas de política exterior han estado casi totalmente ausentes de la actual campaña electoral. Pero hubo pronunciamientos previos de los candidatos sobre estas cuestiones.

La senadora Fernández, favorita según los sondeos para convertirse en futura presidenta argentina, ha defendido los estrechos nexos políticos, económicos y personales que su esposo, el presidente Néstor Kirchner, estableció con Chávez. También respaldó el ingreso como miembro pleno de Venezuela en el Mercosur, al que pertenecen la Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay como miembros fundadores.

Carrió y especialmente Lavagna, estiman riesgoso para el Mercosur el ingreso venezolano, con la natural gravitación que le otorga su enorme potencial petrolífero.

En declaraciones durante una reciente visita a Madrid, Fernández recordó que ''Latinoamérica necesita a Venezuela y a Bolivia para cerrar la ecuación energética, del mismo modo que Europa tiene necesidad de Rusia'', pese a las prevenciones que genera el gobierno del presidente Vladimir Putin.

La candidata gobiernista recordó en Madrid, y posteriormente en Nueva York, que el presidente Chávez fue elegido democráticamente ''y no mató a un opositor ni a una periodista'', aludiendo a las acusaciones de la prensa mundial contra el gobierno de Putin por esos delitos.

Cristina también agradeció al mandatario venezolano ``por el rol que cumplió en momentos muy difíciles en la Argentina''.

Carrió y Lavagna, que encabezan dos coaliciones moderadas, no ocultan en cambio su escasa simpatía por Chávez y destacan el supuesto riesgo de una estrecha asociación económica argentina con Venezuela, principal adquirente de bonos de la deuda de este país y asociada en ambiciosos programas energéticos.

Lavagna declaró en mayo que ''Chávez lleva a Kirchner de las narices'', calificó de ``populista e ineficiente `` el modelo económico venezolano y reprochó al presidente argentino haberle brindado a Chávez ``por tercera vez en dos años, el escenario para hacer un acto popular en el que se ataca al mundo desarrollado y a Estados Unidos''.

''El Mercosur ampliado tiene que ser el núcleo de nuestra política exterior, no para encerrarnos, sino para salir a la relación con Estados Unidos y con Europa en los foros internacionales. Nuestros socios estratégicos son Brasil, Uruguay, Paraguay y Chile'', agregó Lavagna.

Carrió, a su vez, calificó a Chávez de ''populista demagógico y autoritario'' y sostuvo que la política exterior argentina no debe construirse sobre ''parodias populistas'', sino basada en ``una alianza estratégica y complementaria con Brasil''.

El diferendo diplomático con Uruguay está en punto muerto y ventilado ante la Corte Internacional de Justicia de La Haya.

Mientras, el actual gobierno argentino sigue exigiendo que la planta de celulosa, construida por una empresa finlandesa junto a la población uruguaya de Fray Bentos, sea relocalizada fuera del compartido río Uruguay.

Carrió dijo que si es elegida presidenta, su primer viaje será a Montevideo para resolver el tema con las autoridades uruguayas, mientras fustigaba la forma en que el gobierno de Kirchner encaró el conflicto.


Fuente:elNuevoHerald.com.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Decano Jesús María Casal considera que por su profundidad, la reforma ha debido discutirse en una Asamblea Nacional Constituyente

El decano de derechos de la UCAB Jesús María Casal opina que la reforma constitucional, vista la profundidad que ha alcanzado en algunos aspectos, ha debido discutirse en una Asamblea Nacional Constituyente.



Casal asegura que la reforma es de gran profundidad y calado y podría hacer que la Constitución deje de ser de los venezolanos y se convierta en parte del programa de un partido político.



Indicó que, en teoría, la reforma puede impugnarse ante el Tribunal Supremo de Justicia, pero el tema que realmente importa es el futuro de la Constitución por el paso que se está dando.



Casal expresó que cada ciudadano tiene que evaluar la propuesta y quienes la rechazan tienen que agotar y emplear todas las vías democráticas.



El decano sostuvo que hay temas en la reforma que son inaceptables porque representan una regresión en derechos humanos y desde el punto de vista político.


JMS
Globovisión Publicado el 25-10-2007