POR: YON GOICOECHEA.
La unidad debe tener un contenido en propuestas y no en candidatos
Desde la campaña presidencial de 1.998, la "unidad" ha sido uno de las mayores preocupaciones de la oposición. Sin embargo, se ha convertido en un fin y no en un medio, en muchos casos.
A criterio nuestro, la "unidad" se ha sobredimensionado y ha pasado de estrategia a propuesta política, en un país ávido de soluciones reales. En varios procesos electorales anteriores la oposición ha ofrecido "unidad" al elector, mientras que el Gobierno ha ofrecido dignificación, misiones, socialismo, entre otros. Y no es que la práctica populista de ofrecer lo imposible sea adecuada, pero pareciera que ofrecer lo insuficiente tampoco lo es.
De modo que la unidad no debe tragarse a las propuestas, por el contrario, debe ser un medio para materializarlas. Debe decirse cómo vamos a resolver los problemas y no afirmar que la unidad los solucionará, porque ello no es totalmente cierto.
También la opinión pública ha castigado la unidad vacía, por ejemplo, por tanta unidad, Primero Justicia heredó las culpas de una IV República que no vivió, luego de incorporarse a la Coordinadora Democrática. Hoy se castigará igual a los buenos líderes que caigan en abismos restauradores. Contenido y propuestas
En cambio, la unidad debe tener un contenido en propuestas y no en candidatos, pues lo segundo debe ser consecuencia de lo primero, debido a que la unidad popular es más amplia que la electoral. La unidad popular debe centrarse en la lucha por la libertad y contra la pobreza, no en la búsqueda del poder por el poder.
Queremos unidad para vencer el "Muro de Berlín" entre chavistas (a falta de mejor opción) y no chavistas (cansados de encerrarse en guetos), no para polarizar la sociedad nuevamente en torno al presidente. Los venezolanos estamos listos para emprender un viaje juntos, hacia un futuro mejor. Esta unidad nos hará bien, al fin y al cabo, la gente común también merece un voto de confianza.
1 comentario:
Soledad Morillo Belloso // Estrategia y táctica
La unidad no puede ser un protoplasma viscoso, una plastilina moldeable
Nadamos en falsos dilemas. ¡Vaya memez! Nuestra posición es que el Presidente no puede concursar en un proceso electoral presidencial luego de concluir su mandato. Será Presidente hasta 2013. Luego, agarra sus cachachás y se va de Miraflores. Estas elecciones del 23N no son para sacar al Presidente, ni ese debe ser el tema de discusión. Estas elecciones son para construir un país democrático, pluralista y descentralizado. Un país progresista es imposible construirlo con alcaldes y gobernadores que no son más que loritos amaestrados que repiten la vacía consigna del socialismo del siglo XXI, no porque crean en ella, sino porque su supervivencia depende de cuánto "jalen" al jefe. No usar estas elecciones para construir sería un disparate mayúsculo, un acto de simpleza política reprochable e intolerable tanto de los políticos como de los electores.
La polarización es sólo una babosada con patas. La unidad no es una meta, es un camino. Los candidatos no deben ser de la unidad sino para la unidad. La unidad no puede ser un protoplasma viscoso, una plastilina moldeable. Es un asunto de inteligencia democrática, de estrategia y táctica. "unidad" es el candidato que aglutina, el que no nos pone a agarrarnos por los moños por zoquetadas, el que no nos hace perder el tiempo valioso en discusiones bizantinas. "Unidad" es la opción que permite responder a ese clamor que escucho doquiera que voy: "¡Quítennos de encima este alcalde que no sirve para nada!.. ¡Libérennos de este 'piazo' de gobernador que cree que somos un cero a la izquierda!".
"Unidad" responde a la necesidad de entender y hacer algo respecto al "no sirve, no funciona". Es preocuparse y ocuparse. Trabajar para la unidad es volvernos aún más expertos en procesos electorales y no sólo en campañas proselitistas. Es estar dispuesto a estudiar cada una de las posibles trampas, y desarrollar ojo clínico para detectar chuzos. Y exige estar prestos a poner de lado lamentaciones insípidas, fruslerías decadentes y protagonismos inútiles, y enfoquemos estrategia y táctica en el logro de un solo objetivo: sacar del panorama a alcaldes y gobernadores que son un insulto a la inteligencia del pueblo y una afrenta a la democracia.
smorillobelloso@gmail.com
Concejal El Hatillo
Un Nuevo Tiempo
Publicar un comentario