sábado, abril 19, 2008

Hacia América Latina orientan la política los demócratas en EEUU


POR:PABLO BACHELET.


Demócratas orientan la política hacia América Latina

The Miami Herald.WASHINGTON.La presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, rechazó un esfuerzo del presidente George W. Bush para forzar la votación de un tratado de libre comercio con Colombia que no es del agrado de los demócratas.(AP Photo/Mercury News, Dai Sugano)

Un Partido Demócrata con mayoría en el Congreso ha tomado a su cargo el control de la política norteamericana hacia América Latina, con la demora de un acuerdo de libre comercio y el rechazo de los programas de ayuda militar para Colombia y México.

Este papel más activo comenzó después de que los demócratas tomaron el control del Congreso, a principios del 2007, pero ha dado un giro drástico en las últimas semanas, con la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, rechazando un esfuerzo del presidente George W. Bush para forzar la votación de un tratado de libre comercio con Colombia que no es del agrado de los demócratas.

Es muy probable que los legisladores demócratas, según dicen varios funcionarios del Congreso, recorten una solicitud de $500 millones para México que forma parte de un programa antinarcotráfico conocido como la Iniciativa de Mérida, en tanto influyentes demócratas han pedido una total revaluación de la política estadounidense en la región, desde los aspectos relacionados con Cuba y Venezuela hasta la guerra contra el narcotráfico.

"Todo esto no es más que el resultado de que los demócratas tengan de nuevo una voz'', dijo Dan Restrepo, del Centro para el Progreso de Estados Unidos, un grupo de investigaciones dirigido por John Podesta, ex jefe de despacho del ex presidente Clinton. "Durante los primeros seis años de la administración Bush, los demócratas estaban completamente fuera de la película''.

Restrepo dijo que muchos demócratas creen que el gobierno de Bush ha fracasado en sus intentos de que progresen los intereses de EEUU en la región, y que la política ha sido ‘‘mal manejada y negligente''.

Todo ello ha traído como resultado que algunos de los esfuerzos de Bush en América Latina están siendo analizados más a fondo, y hasta obstaculizados por los demócratas.

La semana pasada, la Cámara votó 224-195 para eliminar las cláusulas de vía rápida para el tratado con Colombia, que hubieran obligado a una votación de la Cámara. Bush se quejó de que Congreso ha "empantanado'' la ayuda a Colombia.

El acuerdo con Colombia fue atacado por grupos sindicales y otros de derechos humanos, quienes argumentaron que el país debe hacer más para cambiar sus leyes laborales y proteger a los miembros de los sindicatos y a los activistas de derechos humanos.

La demora del acuerdo de libre comercio tiene lugar luego que los demócratas cortaron $171 millones de un paquete de ayuda militar para Colombia valorado en $614 millones, según el portal electrónico justf.org que sigue los paquetes de ayuda. Otros $55 millones adicionales en ayuda militar están por el momento suspendidos, debido a las preocupaciones por las violaciones de derechos humanos.

La administración está pidiendo se apoye la Iniciativa de Mérida, el paquete antinarcotráfico de tres años y un costo de $1,400 millones para México que Bush dio a conocer en octubre. El Congreso tiene programado debatir una propuesta inicial de $550 millones en las semanas siguientes, de los cuales $500 millones son para México, como parte de un presupuesto de gastos suplementarios de $100,000 millones para Irak y Afganistán.

La administración espera suministrar helicópteros, escáners y equipos de comunicaciones, así como entrenar a las fuerzas de seguridad para ayudar al presidente de México Felipe Calderón a enfrentarse a los poderosos carteles mexicanos de la droga. Este año, más de 700 personas han muerto en incidentes violentos relacionados con la droga. Calderón alega que el gobierno norteamericano debería tener parte de la responsabilidad en la guerra contra los carteles, ya que EEUU consume drogas y es también una fuente de las armas que usan las pandillas de narcotraficantes.

Por su parte, los demócratas dicen que el paquete dedica demasiado dinero a los equipos militares, y debería enfocarse más en la construcción de instituciones mexicanas, como el sector judicial.

En un discurso del 9 de abril que pronunció ante la Academia Naval de Asuntos Externos, en Annapolis, Maryland, el senador Christopher Dodd, demócrata por Connecticut, dijo que a la administración Bush se le debería dar "crédito'' por la Iniciativa de Mérida, pero también observó que la misma se encontraba enclaustrada en el paradigma de "la vieja guerra contra el narcotráfico''.

"La iniciativa de Mérida nunca va a funcionar'', dijo, "si no trabajamos para poner en funcionamiento las instituciones adecuadas, que puedan enfrentar sistemática los retos a la seguridad pública y el cumplimiento de las leyes''.

Tim Rieser, asesor para América Latina del senador Patrick Leahy, demócrata por Vermont, un importante miembro del Comité de Apropiaciones del Senado, dijo que los demócratas "quieren ayudar'', y comprenden que los problemas de México afectan a Estados Unidos, y "en cierto sentido somos responsables de ellos''.

Sin embargo, Rieser dijo que el paquete era "unidimensional'' en su enfoque de los problemas de seguridad, y enfrentaba una reñida competencia por la ayuda del dinero norteamericano, entre otras cosas, la necesidad de ayudar a los refugiados de Irak y de Darfur, así como también a la embajada de EEUU en Bagdad.

Rieser y otros demócratas que fueron consultados por The Miami Herald dijeron estar escépticos de que EEUU pudiera financiar la compra de ocho helicópteros de transporte Bell 412 EP y tres UH-60 Black Hawk.

"Con el tiempo hemos aprendido que esa no es la forma en que se resuelven los delitos relacionados con el narcotráfico'', dijo Rieser.
Los republicanos, por su parte, han expresado que recortar los fondos de la Iniciativa de Mérida es un error.

El senador Richard Lugar, por Indiana, el republicano de cargo más alto en el Comité de Relaciones Exteriores del Senado, dijo que el paquete es "una oportunidad única'' para aumentar la cooperación con México, y que recortar sus fondos "podría dañar las relaciones entre EEUU y México''.

El jefe antidrogas de la Casa Blanca, John Walters, dijo que la Iniciativa de Mérida ya incluye programas como entrenar a la policía y ofrecer cursos de capacitación para los jueces. "El programa no incluye armas y proyectiles'', agregó Walters.

La ayuda a Colombia está parcialmente condicionada en certificaciones de derechos humanos hechas por el Departamento de Estado, pero México considera que estas certificaciones se inmiscuyen demasiado en el país, y Walters se preocupa de que los demócratas puedan proponer condiciones similares en la Iniciativa de Mérida.

"El punto donde comienza nuestra cooperación ha empezado a tomar un tono diferente. Llegar a otro país y dictar decisiones que les pertenecen a ellos es un verdadero problema'', dijo Walters. La administración, agregó, estaba preparada para trabajar en ‘‘medidas legítimas''.

Además de enfocar los cañones a la ayuda militar, los demócratas quieren que se tome un nuevo enfoque hacia América Latina.

Dodd propuso una nueva "sociedad estratégica'' que se basaría en ampliar la seguridad pública y el cumplimiento de la ley, la pobreza y la desigualdad, y la integración de la energía.

Dodd dijo que cambiar la por tanto tiempo sostenida política del embargo norteamericano contra Cuba podría ayudar a EEUU en sus relaciones con América Latina.

El gobernador Richardson, en un discurso que pronunció el 1ro. de abril ante la Organización de Estados Americanos (OEA), quería que EEUU cerrara la instalación penitenciaria de la Base Naval de Guantánamo, pedirle a todos los países --entre ellos Venezuela-- "renovar y fortalecer'' sus relaciones con América Latina.

Quería además "analizar de nuevo'' el embargo a Cuba, llevar a cabo un amplio programa de inmigración sin necesidad de muros y una nueva iniciativa parecida a la Alianza para el Progreso que fundó el presidente Kennedy.

"Estados Unidos'', dijo, "ya no puede darse el lujo de dar por sentada la buena voluntad de América Latina''.


1 comentario:

Anónimo dijo...

Chávez maniobra para evitar fuga de dólares
CASTO OCANDO
El Nuevo Herald

AP Photo/Howard Yanes
Chávez también criticó que se haya entregado más dólares ‘‘para viajeros que para comprar alimentos'', y llamó a tomar medidas destinadas a evitar que "la oligarquía se lleve las reservas''.El gobierno venezolano está considerando establecer un nuevo sistema de cambio de divisas más flexible, de tipo dual, mientras se empeña en una batalla para mantener el control sobre el precio del dólar con el objetivo de detener la enorme fuga de capitales en el país petrolero.

Uno de los objetivos centrales del plan, afirmó esta semana el presidente Hugo Chávez, es reducir al mínimo la salida de unos $18,000 millones anuales, la mayor parte de los cuales viene al sur de la Florida. Varios expertos han advertido de las consecuencias que podría tener la estrategia en la economía sudfloridana.

"No le podemos permitir a la oligarquía que se siga llevando todos los dólares del pueblo'', dijo Chávez en un discurso esta semana en Caracas, en el que sugirió la posibilidad de establecer el nuevo sistema de control de divisas.

Chávez también criticó que se haya entregado más dólares ‘‘para viajeros que para comprar alimentos'', y llamó a tomar medidas destinadas a evitar que "la oligarquía se lleve las reservas''.

Pero el gobierno también está buscando desestimular el llamado mercado paralelo del dólar, y debilitar a largo plazo las presiones inflacionarias con el fin de aliviar el alto costo de la vida que afecta a los venezolanos más pobres, la más importante base electoral del chavismo.

En ese mercado, la moneda norteamericana pasó de cotizarse a 6,400 bolívares por unidad en noviembre pasado --casi tres veces el valor oficial de 2,150 bolívares-- a un promedio de unos 3,500 esta última semana, la cotización más en un año. Esta tasa contradijo todos los pronósticos sobre el alza del dólar.

Según el ministro de Finanzas, Rafael Isea, la brecha entre la cotización del dólar oficial y el dólar paralelo --también conocido como dólar permuta-- se cerrado en un 35 por ciento entre enero y marzo de este año, y podría bajar más.

Para eso, el gobierno de Chávez ha utilizado un polémico plan de emisiones de deuda pública estructurada con el fin de reducir el valor de la moneda estadounidense. Los papeles de la deuda pública se cotizan a un dólar con un precio por encima del valor oficial, pero por debajo del llamado dólar permuta, lo cual podría ser una referencia para el cambio dual, es decir el oficial y el que trae el nuevo sistema.

Para reforzar el plan, Isea dijo que el gobierno comenzará a vender dólares preferenciales directamente a importadores a partir de este mes, principalmente para adquirir alimentos, medicinas, equipos médicos y maquinaria esencial. Esa divisa se canjeará a una tasa inferior a la del mercado paralelo, pero superior a la del canje oficial.

"Ratificamos que vamos a seguir en esta lucha y seguir continuando con las acciones para que la brecha que existe entre el dolar oficial y ese mercado de permuta se reduzca en la mayor proporción posible'', indicó Isea.

El alto funcionario recomendó "al sector especulador que intentó obtener ganancias por la vía de la especulación'' a que "salgan de sus posiciones [en dólares], o van a tener que anotar grandes pérdidas a final del año''.

Con la estrategia de contención oficial, "el dólar está en un valor mucho más cercano a la realidad de lo que estaba antes'', estimó el economista Alexander Guerrero.

El experto dijo que la caída sustancial de la demanda del dólar paralelo, ha ayudado a fortalecer al bolívar, aunque atribuyó esta disminución "al problema político del país y al conflicto con las FARC'', dado que "la violencia política ha desinflado la inversión y el gasto de la gente en Venezuela''.

Sin embargo Guerrero consideró que, a pesar del debilitamiento del dólar en el mercado paralelo, "no se está viendo una reducción de los precios de los bienes importados'', en buena medida por "la incertidumbre, los costos de resposición y la caída de la demanda interna''.

Durante los dos primeros meses del año, la inflación acumulada registró 5.3 por ciento, superior al 3.4 por ciento del mismo período el año pasado.

Los efectos de la medida oficial se están comenzando a sentir en el sur de la Florida, que mantiene una relación comercial de unos $8,000 millones anuales con Venezuela.

"La situación está afectando a algunos sectores que cambian dólares por bolívares, porque el rendimiento por dólar ha bajado notablemente'', dijo el empresario Eric Shummer, el propietario de una firma tecnológica con sede en Fort Lauderdale.

"El que está cambiando dólares para comprar bolívares está recibiendo la mitad de lo que recibía hace seis meses, pero para muchas empresas que tenían colocaciones en bolívares, es un bueno momento porque ahora pueden comprar más dólares con los mismos bolívares que lo que podían comprar hace seis meses'', detalló Shummer, que fue presidente de la Cámara Venezolana Americana de Comercio de la Florida.

Al mismo tiempo, agregó el empresario, también es un momento favorable para las compañías del sur de la Florida que tienen contratos de servicio y reciben pagos en bolívares en Venezuela.

Debido a la baja demanda de dólares en Venezuela, el flujo de divisas que normalmente ingresa a Miami se está reduciendo, indicó Lucas Pérez, un corredor privado que trabaja con clientes venezolanos.

"Para mucha gente resulta más atractivo invertir los bolívares en bienes raíces en Venezuela, o en la compra de euros, porque se genera un mejor rendimiento'', afirmó Pérez.