32 ECUATORIANOS ABANDONADOS EN ALTAMAR, RESCATADOS.
23 de Abril de 2007. San Salvador (Prensa Gráfica)Con la esperanza puesta en Estados Unidos, 32 ecuatorianos salieron del Puerto de Esmeraldas, el pasado viernes 13 de abril, a bordo de la embarcación Mariana de Jesús, rumbo a las costas de Guatemala, donde iniciarían en tierra firme su travesía hacia el norte.
El grupo, sin embargo, fue abandonado en aguas salvadoreñas por el capitán, un coyote al que habían pagado por el viaje. Los sudamericanos iban ocultos en la embarcación y no sabían que navegaban a la deriva sino hasta que el buque USS Rodney de la marina estadounidense los rescató el viernes y los entregó ayer a las autoridades salvadoreñas.
Migración recibió a los emigrantes a 14 millas náuticas frente a las costas de Puerto El Triunfo, en Usulután.Georgina Trejo, de Migración, informó que el grupo de ecuatorianos está formado por cinco mujeres y 26 hombres.
“Vamos a determinar si en realidad son ecuatorianos, la condición física de ellos es desgastante, han sufrido en estos días en alta mar, por lo que al no encontrarles documentación se les dará un permiso temporal mientras se procesa su información”, explicó Trejo.
Sobre el proceso de deportación, la funcionaria dijo que se coordinará con la embajada de Ecuador en la capital.Después del chequeo, los náufragos fueron trasladados a San Salvador, específicamente a la División de Fronteras de la Policía, para que sean resguardados.“Por mis hijos viajé”La mayoría de los ecuatorianos abandonados en alta mar el jueves pasado, por el coyote que los transportaba en la embarcación pesquera, aseguró que “por buscar el bienestar de sus hijos hicieron este viaje”.
“Mi sueño era llegar a Estados Unidos, donde pretendía trabajar para poder pagar la hipoteca de mi casa ubicada en Cuenca, el estudio de mis hijos y poder enviar dinero para su alimentación”, explicó Alberto Guasco, de 36 años, padre de siete menores.El inmigrante aseguró que ahora espera saber quién le responderá por los casi $4,000 que entregó al coyote que lo trasladaba vía marítima a su destino y espera que al llegar a su país encuentre una respuesta, pero duda al responder sí lo volvería a intentar.
“Sin ayuda”Entre lágrimas y recuerdos en los ocho días de haber salido en la embarcación Luis Alfredo Morocho, de 38 años, explicaba que su destino era ir a cualquier lugar de Estados Unidos y poder trabajar para enviar dinero.Morocho recordó uno a uno sus siete hijos, quienes ahora no podrán contar con la ayuda que él les prometió al partir de su natal Azuay.“Quiero saber cómo contactar con ellos: Silvio Román, de 16 años; Nuria Rovilda, de 14; Ester Yolanda, de 13; German Oswaldo, de 10; Delia Verónica, de ocho; Welinton Fernando, de cuatro; y mi pequeño Luis Mateo, de dos”, dijo.
“Nuestra partida fue el jueves 12 de abril por la noche, nos encerraron en un compartimento del barco, por momentos salíamos, pero el jueves 20 en la noche quienes nos abrieron la puerta fueron miembros de la milicia estadounidense”, comentó.
TESTIMONIOS
“Yo hipotequé mi casa, ahora quién me responde por eso si casi todo el dinero lo entregué para hacer este viaje.” Alberto Guasco, ecuatoriano“Mi sueño era llegar a Estados Unidos y ayudarle a mis siete hijos, por el bienestar de ellos me aventuré.” Luis Alfredo Morocho, ecuatoriano.
Fuente: La Hora (Ecuador).
1 comentario:
Estimados amigos, espero puedan contactar a este señor de nombre Alberto Guasco, es fundamental saber si es que se llama de esta forma y que la ortografía de su nombre este escrita de manera correcta, si es así, se debe acercar a la Union Internacional Guasco, todos sus miembros llevan este mismo apellido y ellos lo puede ayudar, para más información visite: http://www.laluzysombra.com/guascoonline.html
Allí puede contactar en:
info@laluzysombra.com
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